Isla de Cortegada
Cortegada, la desconocida isla de Galicia con el bosque de laureles más grande de Europa
Este paraíso natural de la ría de Arosa, conocido como bosque flotante, casi se convierte en la residencia de verano de Alfonso XIII, pero el proyecto nunca llegó a materializarse
Galicia es la región con mayor extensión costera de toda España. Atesora aproximadamente 1.500 kilómetros sin contar con islas, marismas y arenales, cuya cifra alcanza los más de 2.500 kilómetros. En este litoral se esconden verdaderas joyas de la naturaleza, desde las más famosas hasta las que permanecen casi secretas para el gran público. Es aquí donde se podría encuadrar la isla de Cortegada.
A pesar de formar parte del Parque Nacional Marítimo-Terrestre de las Islas Atlánticas de Galicia, la isla de Cortegada es una gran desconocida frente a la fama de las Cíes o las Ons.
El mayor bosque de laureles
Ubicada en la ría de Arosa, frente al pueblo de Carril (Villagarcía de Arosa), se trata de la isla principal de un pequeño archipiélago conformado por As Malveiras, Briñas y el islote de O Con, en la desembocadura del río Ulla. Con 191 hectáreas (43,8 terrestres y 147,2 marinas), Cortegada se encuentra más protegida de la fuerza del mar y el viento del Atlántico, lo que la hace perfecta para el cultivo de mejillones, ostras y almejas, como las conocidas almejas de Carril.
Esta isla destaca por tener el mayor bosque de laureles en estado natural de Europa. De hecho, se la conoce como bosque flotante. Adentrarse en sus más de dos hectáreas de extensión en la zona norte del islote y con una altura de hasta 13 metros desde el suelo es una experiencia mágica. También es el hogar de castaños, robles, sauces y helechos
Isla de Cortegada
La isla cuenta con una antigua aldea que estuvo habitada hasta 1910 y de la que a día de hoy aún se conservan algunas de sus ruinas. Los últimos habitantes abandonaron la zona después de que fuese donada al rey Alfonso XIII, cuya intención era convertirla en su residencia real de verano. Se ideó el proyecto, pero nunca acabó materializándose porque la ubicación de este palacio fue finalmente en La Magdalena, en Santander.
El Rey Juan Carlos I vendió la propiedad en 1974 a una inmobiliaria que quiso construir una urbanización de lujo, pero el proyecto tampoco se hizo realidad. En la actualidad, es propiedad de la Xunta de Galicia.
Ermita de la Virgen de los Milagros
Si no fueran pocos los atractivos de la isla, esta también alberga otra joya: la Ermita de la Virgen de los Milagros, que se alza junto a un majestuoso crucero. Se trata de un lugar muy especial con gran valor histórico porque era lo primero que veían los marineros al retomar el camino a casa después de las largas jornadas de faena, lo cual le confirió un gran simbolismo de protección y de devoción marinera.