Escuela de Verano en la parroquia de San Vicente Ferrer
Una parroquia facilitará la conciliación familiar durante esta Navidad
Los monitores son jóvenes universitarios del barrio
a iniciativa es de la parroquia de San Vicente Ferrer, en el barrio de Cañero, y el objetivo es descargar a los padres del cuidado de los niños durante el próximo periodo vacacional. Así surge la denominada Escuela de Navidad, que ya tuvo un antecedente años atrás, y que nace de la experiencia que cada año lleva a cabo con la Escuela de Verano, que lleva funcionando desde hace siete años.
Como explica el párroco, Pablo Garzón, lo que se busca es que «los padres, si se ven apurados, tengan una salida y no lo carguen todo sobre los pobres abuelos». De este modo, los días y los horarios de la Escuela de Navidad están diseñados para facilitar la denominada conciliación laboral y familiar.
Fechas y horarios
Esta iniciativa funcionará en dos semanas, del 26 al 30 de diciembre y del 2 al 5 de enero, de 09:00 a 14:00, con flexibilidad tanto a la entrada como a la salida.
Está destinada a niños de entre 3 y 12 años, que en estos días participarán de las actividades lúdicas organizadas por un grupo de monitores, compuesto por jóvenes universitarios del barrio de Cañero, algunos de los cuales cursan estudios relacionados con la educación.
Escuela de Verano en la parroquia de San Vicente Ferrer
La parroquia de San Vicente Ferrer dispone de unos 1.000 metros cuadrados de salones parroquiales, entre los que hay una docena de aulas y dos salones amplios para actividades, incluso deportivas.
Una parroquia cercana
Como detalla Garzón, con la Escuela de Navidad se quiere que los feligreses «no vean a la parroquia sólo como un centro de culto, sino que la vivan y la sientan cercana», con actividades de todo tipo, como ésta que facilita la conciliación.
Además, se ha diseñado un cuadro de precios si el niño acude las dos semanas, sólo una o acude días sueltos. También hay descuentos muy interesantes si participa más de un hermano, con la gratuidad para el tercero y siguientes.
«El objetivo de pagar por asistir a la Escuela de Navidad no es tanto para la parroquia, sino que tenga una finalidad y es que los monitores puedan asistir a la Jornada Mundial de la Juventud de este verano, pero también pensamos en las familias, porque éste es un barrio sencillo», explica el párroco.
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