
Proyecto innovador de la nueva fábrica Clesa
La antigua fábrica Clesa, camino de ser Bien de Interés Cultural y el mayor centro biotecnológico de España
El consejero de Cultura ha explicado que esta declaración no afecta a los proyectos que tiene encima de la mesa el Ayuntamiento
La antigua fábrica Clesa, uno de los lugares más icónicos de Madrid, está cerca de convertirse en Bien de Interés Cultural después de varios años de insistencia de los vecinos y de la oposición. El consejero de Cultura, Mariano de Paco, ha indicado que este espacio ubicado en el distrito Fuencarral-El Pardo tendrá una protección especial. Además, se le suma el proyecto que estaba sobre la mesa de convertirse en un centro biotecnológico.
Según ha detallado De Paco, están trabajando en la categoría de BIC, después de haber pedido un informe nuevo que abre la puerta a proteger el edificio como «monumento» y está manteniendo reuniones con el Colegio Oficial de Arquitectos.
El viejo edificio de Centrales Lecheras Españolas (Clesa) es una las primeras estructuras españolas realizada en hormigón prensado, lo que permitía eliminar pilares y obtener así grandes espacios diáfanos. Lleva en el foco mediático desde hace más de una década y numerosas asociaciones han solicitado su protección.
Este edificio, diseñado por el arquitecto Alejandro de la Sota y construido entre 1957 y 1961, fue considerado desde su inauguración una obra maestra de la arquitectura industrial española contemporánea y referente del desarrollo industrial del barrio obrero de Fuencarral.

Zonas verdes del futuro edificio de la fábrica Clesa
En julio del año pasado, 36 entidades, entre ellas la Federación Regional de Asociaciones Vecinales (Fravm), y casi setecientas personas a título individual, registraron una petición a la Comunidad de Madrid para su declaración como Bien de Interés Cultural (BIC).
De Paco también ha dejado claro que esta declaración no afecta a los proyectos que tiene encima de la mesa el Ayuntamiento de Madrid. «Es un elemento de especial importancia y no debería de haber ningún tipo de colisión».

Zona de cooworking
Centro biotecnológico
A lo largo de más de 10.500 metros cuadrados, se levantarán una serie de edificios destinados a la investigación en medicina y biotecnología. Bajo el nombre de proyecto Val-verde, este nuevo hub será un ecosistema abierto a la comunidad científica.
La biotecnología y la medicina serán los temas principales de innovación que desarrollarán e investigarán los profesionales del tema. Además, contará con un centro cultural de 1.000 metros cuadrados, un centro de congresos para más de 500 personas y un espacio polivalente de coworking.

Vistas desde el nuevo hub de Clesa
Val-verde pretende ilustrar el nivel arquitectónico del nuevo diseño del edificio. Los trabajos de reformas mantendrán el patrimonio, la conservación y la esencia de los elementos que caracterizan a la antigua fábrica.
Esta fusión arquitectónica recibe el nombre de «Fábrica Circular», un lugar donde cooperarán los proyectos público-privados de carácter social y sanitario «con claros objetivos medioambientales».

Interior del nuevo proyecto de la fábrica Clesa
Val-verde quiere imitar otros proyectos de innovación que han tenido un gran éxito internacional, como el premio EUMies 2022 de La Boda por Lacol.
La nueva fábrica Clesa dejará a un lado la industrialización y dará un paso hacia la ciencia y la innovación. Este nuevo hub servirá para unificar empresas público-privadas y fomentará la cultura y el trabajo científico.