Un bombero de la Comunidad de Madrid trabaja en labores de extinción de un incendio
La polémica de los bomberos forestales de Madrid: «Las mejoras salariales dependen del Gobierno de Sánchez»
Los profesionales piden que se actualice el convenio que lleva bloqueado desde 2008
Hace dos semanas, 16 bases de los bomberos forestales de Madrid quedaban inoperativas por un sabotaje a manos del personal del sector que se ha manifestado en huelga. Esta movilización corre a manos de la empresa estatal Tragsa, de quien dependen los brigadas forestales de la Comunidad de Madrid. Los daños consistieron en colocar «pitones» en las puertas exteriores de los recintos para dificultar el acceso a los mismos así como la inutilización de las cerraduras de acceso a los edificios que sirven como base a dichos recursos. Además, la base helitransportada de Valdemorillo quedó fuera de servicio.
El consejero de Medio Ambiente de la Comunidad de Madrid, Carlos Novillo, instaba este fin de semana al Gobierno de Pedro Sánchez a alcanzar un acuerdo que permita mejorar los salarios de los bomberos forestales, cuyo convenio colectivo permanece bloqueado desde 2008.
El responsable de Seguridad Regional y bombero de vocación calificó la situación como «muy desagradable y preocupante». Además, comentó que se han puesto en peligro tanto la seguridad operativa de los recursos como la integridad física de los propios profesionales.
La huelga, convocada del 15 de julio al 15 de agosto, responde a la paralización del convenio colectivo que afecta a los bomberos forestales de la empresa pública Tragsa que lleva sin actualizarse desde el 2008.
Novillo ha repetido en reiteradas ocasiones que fue el Gobierno regional el que, hace cuatro años, impulsó el cambio de modelo para que estos trabajadores pasaran de depender de contratas privadas a integrarse en una empresa pública, de esta manera tendrían mejoras salariales.
Bombero de la Comunidad de Madrid
En redes sociales se han visto varias nóminas de estos bomberos forestales donde llegaban a cobrar 1.200 euros al mes. El consejero madrileño remarcó que la negociación del nuevo convenio es competencia de Tragsa, empresa estatal, y que corresponde al Ministerio de Hacienda aprobar las mejoras salariales.
Así, subrayó que «la Comunidad de Madrid no puede llevar a cabo esa negociación, pero ha hecho un encargo de más de 25 millones de euros que deja margen para estas mejoras».
Al consejero de Medio Ambiente le parece curioso que estas protestas solo se estén produciendo en la Comunidad de Madrid, a pesar de que Tragsa opera en otras regiones y gestiona otras brigadas cuyos salarios «son incluso más bajos».
Isabel Díaz Ayuso, y el consejero de Medio Ambiente, Agricultura e Interior, Carlos Novillo
Acciones de Madrid
Por otro lado, la Comunidad de Madrid ha aprobado el acuerdo de la mesa sectorial de personal funcionario que regula las condiciones de trabajo del Cuerpo de Bomberos regional para el periodo 2025/28. El nuevo texto refuerza la plantilla, aumenta las retribuciones, incorpora un plan de empleo y relevo generacional y optimiza la organización interna.
Este marco prevé la incorporación de nuevos efectivos a través de sucesivas ofertas públicas anuales, ajustadas a las previsiones de jubilación y a la apertura de nuevos parques para garantizar un servicio rápido y eficaz en toda la región.
Además, se incluye la obligación del paso a funciones de respaldo operativo, sin intervención directa en siniestros, al alcanzar determinada edad –62 años en 2028–, favoreciendo la transferencia de experiencia y el relevo generacional.
Bombero de la Comunidad de Madrid
También se reconocen los riesgos y exigencias técnicas de la labor del bombero con una adaptación del complemento de destino en varias categorías y una adaptación singular del específico desde enero de 2026.
De la misma manera, se fijan mejoras en los servicios extraordinarios y los incentivos asociados a la formación, el desempeño físico y la participación en proyectos y grupos especiales.
Así mismo, el acuerdo da un marco regulador claro a la compensación por la participación en proyectos estratégicos y reconoce con retribuciones diferenciadas a equipos de intervención especializada, como el Grupo de Rescate en Altura o el Grupo de Drones.