Casas quemadas tras el incendio en Tres Cantos
Los vecinos de Tres Cantos, todavía con el susto en el cuerpo: «Esto ha sido horrible»
El incendio comenzó el lunes a las 19.45 horas en una zona de vegetación del este de Tres Cantos y se propagó con velocidad a urbanizaciones como Soto de Viñuelas y Fuente El Fresno
Tres Cantos comienza a recuperar la normalidad tras el devastador incendio forestal que se desató el pasado lunes 11 de agosto a última hora de la tarde. El fuego, que comenzó sobre las 19.45 horas en una zona de vegetación cercana al este del municipio, se propagó con una velocidad inusitada hacia zonas residenciales, impulsado por rachas de viento superiores a los 70 km/h y condiciones de calor extremo. Urbanizaciones como Soto de Viñuelas, Fuente El Fresno y zonas limítrofes de Colmenar Viejo fueron las más afectadas.
El incendio, catalogado como de Nivel Operativo 2 del Plan INFOMA, movilizó un despliegue sin precedentes: 34 dotaciones de bomberos, la Unidad Militar de Emergencias, el SUMMA 112, la Guardia Civil, Policía Local y numerosos voluntarios. En total, fueron evacuadas cerca de 200 personas, muchas de ellas en situación de emergencia, mientras las llamas llegaban hasta los patios de varias viviendas. Cuatro casas resultaron completamente calcinadas.
Durante la noche del lunes, la evolución del incendio permitió que se empezaran a trazar cortafuegos, y en la madrugada del martes, parte de los vecinos desalojados pudieron regresar a sus hogares. Aun así, se estima que el fuego ha arrasado ya unas 1.500 hectáreas, convirtiéndose en uno de los incendios más destructivos de la Comunidad de Madrid de los últimos años.
La Cruz Roja, en coordinación con el Ayuntamiento de Tres Cantos, habilitó varios refugios, como el Centro Deportivo Enrique Más y la biblioteca municipal. La técnico en emergencias y transportes sanitarios urgentes de esta entidad confirmó que se filiaron 181 personas, de las cuales 106 fueron finalmente albergadas, incluyendo 38 menores. «Ellos de primeras movilizaron el agua y la comida que teníamos allí. Y bueno, nosotros hemos dotado aquí con el punto de avituallamiento de suministros y sobre todo de hidratación para los equipos. Y luego nosotros también hemos dotado de equipos intervinientes, tanto sanitarios como psicosociales», aseguró.
Mientras se siguen evaluando los daños materiales y medioambientales, el recuerdo del humo invadiendo los hogares permanece vivo en la memoria de los vecinos. «Esto ha sido horrible. Hay una ganadería al otro lado de la valla y probablemente el fuego haya llegado hasta allí atrás» confesó una mujer evacuada de Soto de Viñuelas.
Aunque las llamas ya han sido controladas, las autoridades mantienen la vigilancia ante posibles rebrotes, especialmente con las previsiones de tormentas para esta semana. La Comunidad de Madrid ha pedido extremar la precaución en zonas forestales mientras se investiga el origen del fuego, del que todavía no se ha confirmado si fue accidental o provocado.
