Juan Carlos Monedero, uno de los cofundadores de Podemos
Monedero vuelve a dar clase en la Complutense sin que se haya resuelto su expediente por agresión sexual
El fundador de Podemos lleva semanas ejerciendo de profesor de la materia de Política Comparada
Juan Carlos Monedero ha vuelto a la Universidad Complutense sin que se haya resuelto su expediente interno por una supuesta agresión sexual a una alumna. El regreso ha generado malestar y sorpresa a la comunidad universitaria dado que no ha salido una sentencia.
Monedero lleva semanas ejerciendo de profesor de la materia de Política Comparada. Esta asignatura es una de las principales del segundo curso de Relaciones Internacionales.
La vuelta de uno de los fundadores de Podemos ha generado malestar y temor entre los alumnos y los profesores. Esta circunstancia se produce mientras sigue abierto el expediente de carácter confidencial por la denuncia de acoso sexual de una joven.
La denuncia por acoso sexual contra el fundador de Podemos se interpuso el 10 de enero de este año. La Universidad Complutense derivó el caso a la Fiscalía por si los hechos eran constitutivos de delito. El pasado mes de junio el Ministerio Público archivó el procedimiento.
No es la primera vez que Monedero está ante la Justicia por temas relacionados con insultos sexuales o agresiones. En junio de este año, la Fiscalía Provincial de Madrid archivó una denuncia contra él por la presunta comisión de un delito contra la integridad moral en relación a supuestos comportamientos hacia alumnas.
El pasado mes de abril, el Ministerio Público recibió comunicación de la citada universidad por la que se daba traslado del Expediente Disciplinario abierto al entonces profesor titular de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociología de dicha universidad.
En el presente caso, el fiscal señala que la conducta llevada a cabo por el denunciado durante el curso académico 2021-2022 no es constitutiva de un delito contra la integridad moral del artículo 173. 1 del Código Penal, por «no cumplir con los elementos del tipo».
Juan Carlos Monedero en un acto de la Policía Nacional Bolivariana en Caracas
Según la Fiscalía, «los hechos anteriormente descritos no tienen la entidad suficiente para considerarlos como un trato degradante y atentado grave contra la integridad moral de las alumnas».
Esgrime que «las conductas recogidas en la denuncia consisten en expresiones referidas de manera individual a distintas alumnas, no constando que tales expresiones y conductas fueran reiteradas respecto de cada una de aquellas».
Tras ello, expone que las mismas «pueden ser calificadas como inadecuadas, improcedentes, fuera de lugar y reprochables moralmente, sobre todo de quien se dedica a enseñar y a quien se le exige una cierta responsabilidad social vinculada a transmitir unos valores éticos, pero no todo trato degradante será punible, sino sólo los más lesivos».
«La escasa entidad de los hechos, el marco en que se producen y el tiempo transcurrido no han permitido obtener los elementos precisos para interponer una denuncia por un delito contra la integridad moral. No obstante, ha de señalarse el perjuicio y daño que pueden causar estos comportamientos entre el alumnado», agrega.
«Esta situación de vulnerabilidad y de asimetría debe ser conocida por quien tiene la autoridad para restablecer el equilibrio y evitar que se produzcan estas situaciones, cuanto menos desafortunadas, impropias, inadecuadas y gratuitas, las cuales podrían, en su caso, corregirse en vía disciplinaria mediante la continuación de la tramitación del Expediente Disciplinario incoado», concluye.
