Capilla de la Santa Cueva de Covadonga (Asturias)
Covadonga y los Picos de Europa: la escapada activa con más historia de España
Pocos lugares combinan un entorno natural tan bello con un simbolismo histórico tan potente para España. Leyenda, naturaleza y turismo activo en estado puro
Es uno de los lugares más emocionantes de la península para quienes aman la historia y también uno de los enclaves más bellos y singulares de nuestra geografía. El corazón de Asturias alberga el lugar legendario donde se inició la Reconquista, un escenario cargado de leyenda y también de religiosidad, y uno de los destinos turísticos más bonitos de la Comunidad Autónoma asturiana.
Covadonga es un lugar legendario, considerado el origen simbólico de la España medieval
Porque aquí, en Covadonga, en el concejo asturiano de Cangas de Onís, la historia se camina, se siente, se escucha y casi se respira. Rodeada por los imponentes Picos de Europa, esta escapada combina, como poca leyenda, naturaleza y turismo activo, en un escenario considerado el origen simbólico de la España medieval.
Don Pelayo y la leyenda
La famosa cueva donde se refugió Don Pelayo.
Según la tradición, fue en la cueva de Covadonga donde el noble visigodo Don Pelayo se refugió junto a un pequeño grupo de hombres para resistir al ejército musulmán a comienzos del siglo VIII. La victoria, atribuida a la intervención divina de la Virgen, dio lugar a la Batalla de Covadonga y al nacimiento del Reino de Asturias, considerado el primer paso de la Reconquista. Según las crónicas, la victoria de Don Pelayo fue una combinación de una táctica inteligente de emboscada en un terreno ventajoso y una caída de rocas que diezmó a los musulmanes en su retirada y que la leyenda transformó en un acto milagroso de la Virgen de Covadonga.
Cruz y basílica de Covadonga vista desde el interior de la Santa Cueva
A la Virgen de Covadonga se la venera en ese mismo lugar en la cueva y es conocida como La Santina, una imagen de la Virgen María y el Niño Jesús que preside la cueva suspendida sobre el vacío. La imagen original de la Virgen, que se cree que databa del siglo X, se perdió en un incendio en 1777. La Santina actual es una réplica donada por el Cabildo de la Catedral de Oviedo en 1778. Hoy Nuestra Señora de Covadonga es la patrona del Principado de Asturias y una de las figuras religiosas más veneradas de España.
La Santina y la cueva sagrada
La Virgen de Covadonga dentro de la Santa Cueva
La aparición de la Virgen en la cueva es uno de los relatos más arraigados del norte de España. El agua que brota bajo la imagen, formando una cascada, refuerza el carácter místico del enclave. Más allá de creencias religiosas, Covadonga es un lugar que impresiona por su atmósfera: roca, silencio y bosque crean un espacio único que explica por qué ha sido durante siglos destino de peregrinos, reyes y viajeros.
La fuente de los siete caños
Fuente de los siete caños en Covadonga
Muy cerca de la cueva se encuentra otro de los símbolos populares de Covadonga: la fuente de los siete caños. La tradición dice que «de los siete caños, moza que bebe se casa en un año», una leyenda que sigue viva y que convierte la visita en un ritual para muchas jóvenes. Este tipo de tradiciones, transmitidas de generación en generación, aportan a Covadonga un encanto que va más allá de lo monumental.
Patrimonio y naturaleza
Basílica de Santa María la Real de Covadonga
El Real Sitio de Covadonga incluye asimismo la basílica neorrománica, la explanada y la cueva, todo ello enmarcado por un maravilloso entorno natural. Desde aquí comienza la vertiente más activa de la escapada: los Picos de Europa, primer Parque Nacional de España, ofrecen rutas para todos los niveles y algunas de las vistas más espectaculares de España.
Escapada activa
Lagos de Covadonga.
Los Lagos de Covadonga, la ruta del Cares, los miradores naturales y los senderos de alta montaña hacen de la zona en un paraíso para senderistas, ciclistas y amantes de la naturaleza. Es una escapada ideal tanto para un fin de semana como para varios días, combinando paseos, gastronomía asturiana y pequeños pueblos con encanto.
La cueva de Covadonga y los Picos de Europa conforman un destino para vivir una experiencia completa. Si bien en invierno puede que el tiempo no acompañe, siempre será un lugar fundacional de la historia España, donde evocar leyendas populares y disfrutar de paisajes de montaña que, cuando el tiempo acompaña, invitan a moverse, a caminar y a respirar el aire del norte. Una buena fabada en un restaurante de pueblo con un poco de sidra compensará con creces el posible frío vivido durante la visita.
