El Príncipe harry, en su visita a Sudáfrica en 2015
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La organización benéfica del Príncipe Harry en África, investigada por violación de derechos humanos
Se estudian las supuestas atrocidades cometidas por los guardias contra pueblos indígenas de la República del Congo tras una «década de alertas»
Es probable que el duque de Sussex se enfrente a presiones para dimitir de la junta directiva de una organización benéfica conservacionista africana después de que surgieran nuevas acusaciones de abusos cometidos por sus guardabosques armados, incluido el uso de un método de tortura conocido como «el columpio».
Testimonios de primera mano sobre la supuesta brutalidad infligida por el personal administrado y pagado por African Parks aparecen en un nuevo libro basado en una investigación de tres años sobre la organización, que está financiada por ayuda británica, celebridades y multimillonarios estadounidenses.
El libro Entrepreneurs in the Wild de Olivier van Beemen incluye docenas de incidentes de presunto abuso a partir de entrevistas realizadas con víctimas y aquellos que afirman haber perpetrado el abuso, incluido el personal actual y anterior de African Parks.
El Príncipe Harry fue presidente de la organización durante seis años antes de ser ascendido a la junta directiva el año pasado. Sus nuevas funciones incluyen la responsabilidad compartida de la política de la organización y la supervisión de su gestión de 22 parques nacionales en asociación con gobiernos de una docena de países africanos.
Después de la amarga separación del príncipe de la familia real, valtos funcionarios de African Parks declararon a Van Beemen que se plantearon si seguía siendo una conexión útil. «¿Estas controversias en torno al Príncipe no representaban un riesgo para la organización?», fue la pregunta que desencadenó la discusión.
En más de una ocasión ha dejado claro que le gustaría vivir en el continente africano
El libro, escrito en holandés y publicado por Prometheus Amsterdam, es el resultado de una investigación de tres años realizada por Van Beemen, autor de cuatro libros, incluido Heineken in Africa: A Multinational Unleashed de 2019 , una investigación sobre la empresa cervecera para la cual ganó un prestigioso premio de periodismo. Su publicación se produce después de que African Parks anunciara en enero que había comenzado una investigación sobre acusaciones separadas de violación y tortura por parte de sus guardias en la República del Congo.
El autor plantea un panorama preocupante de una ambiciosa organización benéfica financiada con fondos extranjeros que despliega guardabosques bien armados, con el acuerdo de los gobiernos africanos, para alterar a la fuerza las antiguas tradiciones de las comunidades locales en un área comparable al tamaño de Gran Bretaña.
Foster Kalunga, quien fue guardabosque en Zambia durante cinco años hasta 2022, afirmó que él y sus colegas utilizaron palizas y un método de tortura conocido como kampelwa («el columpio») para extraer información de presuntos cazadores furtivos en el parque nacional Liuwa Plain. «Atas a alguien, atado de pies y manos, detrás de su espalda, y lo cuelgas de un palo entre dos ramas. Y luego lo haces girar mientras lo golpeas. No dura mucho porque duele mucho. Cuando está ahí dice todo lo que quieres, incluso cosas que no sabe».
African Parks, por su parte, se defendió afirmando que Kalunga había sido despedido por mala conducta grave y dijo que no tenían conocimiento del método de tortura utilizado por sus guardas forestales.
Van Beemen reflexiona y argumenta que su investigación «muestra que African Parks es una organización opaca con numerosas acusaciones de derechos humanos en su contra, incluidas tortura y violación, pero que no está abierta a críticas externas. Creo que el Príncipe Harry y otros miembros de la junta deberían cuestionar el modelo de la organización, sus prácticas y su gobernanza y reconsiderar sus propios roles».
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