La 'dolce vita' del hijo pequeño de Conde-Pumpido: fiestas, viajes y un puestazo en Telefónica

Un paseo por West Hollywood a bordo de un Ford Mustang descapotable, una mañana buceando en Filipinas, un baño con elefantes en Sri Lanka o un atardecer en Portofino a bordo de un yate. La cuenta de Instagram de Gonzalo Conde-Pumpido, de 32 años, no tiene nada que envidiar a la de cualquier influencer o millonario que presume de un alto nivel de vida en sus redes sociales. Eso sí la última publicación data de de octubre de 2024 y en ella aparece con Francina Armengol, en el Congreso de los Diputados, presentando un estudio de políticas energéticas. Quizá desde hace unos meses busca proyectar un perfil más profesional por recomendación paterna.

El hijo menor del presidente del Tribunal Constitucional, Cándido Conde-Pumpido, y de la magistrada Clara Martínez de Careaga, ha fichado como directivo en Telefónica, tal y como avanzó El Debate. El contrato se ha cerrado tres meses después de que Moncloa maniobrara para colocar a un afín al PSOE al frente del gigante de las telecomunicaciones. El cargo que ostenta dentro de la compañía es el de gerente y analista jefe de Políticas Públicas, Competencia y Asuntos Regulatorios.

Cierto es que Gonzalo Conde-Pumpido mantiene en este momento su perfil de Instagram público. Es decir, no oculta el tren de vida del que ha disfrutado o disfruta, pues como comentamos ya no hay material gráfico reciente. Eso sí tanto en su perfil como en su día a día el joven se presenta como Gonzalo Conde y el Pumpido lo oculta.

El hijo pequeño de Conde-Pumpido ha pertenecido a Society Mad, un grupo de jóvenes de la alta sociedad que organiza fiestas privadas en zonas exclusivas como Pozuelo de Alarcón y Las Rozas. Así lo avanzó Vanitatis. Juergas que incluyen megatrón de discoteca, iluminación profesional y decoración personalizada. Aunque Gonzalo ha tratado de restarle importancia afirmando que son reuniones con amigos.

Como cualquier hedonista con padre rico y poderoso, Gonzalo ha viajado por medio mundo y ha recibido la mejor formación. Durante su adolescencia, participó en programas de estudios en el extranjero pasando veranos en ciudades como Honolulu, Miami, Singapur y Chicago. Posteriormente, realizó un máster en gestión internacional que lo llevó a residir en San Francisco, Dubái y Shanghái. Estas experiencias no solo le permitieron perfeccionar su inglés, sino tejer una importante red de contactos.

Formado en Cunef, donde estudió Finanzas, Gonzalo ha enfocado su carrera hacia la consultoría digital y la defensa de la sociedad civil. Ha trabajado en proyectos como Order In, una aplicación que digitaliza la experiencia en restaurantes, y ha colaborado con figuras como María Urquijo en el desarrollo de marcas de ropa. Además, se ha implicado en iniciativas como Demos Lab, un centro de pensamiento sobre la democracia «que busca generar espacios de diálogo y reflexión sobre la participación democrática».

Minucias comparado con su nuevo puesto de directivo en Telefónica, un nombramiento que ha suscitado controversia debido a su cercanía al Gobierno. El fichaje coincide con un momento en que su padre se encuentra en el centro de la polémica como presidente del Tribunal Constitucional. Durante su mandato, el Tribunal de Garantías ha respaldado decisiones clave del Gobierno de Pedro Sánchez.

El salario de Gonzalo en este cargo superaría los 100.000 euros anuales, además de beneficios adicionales como bonificaciones y planes de pensiones.

A pesar de su estilo de vida ostentoso, quienes conocen a Gonzalo Conde-Pumpido destacan su carácter reservado y hasta ahora era el miembro más desconocido de la familia. El presidente del Tribunal Constitucional tiene tres hijos; de su primer matrimonio con Ana María Varela Rey fue padre de dos hijos: Cándido, detenido en varias ocasiones, la última de ellas tras ser acusado de agresión sexual en un caso que finalmente fue archivado, y Roi. Después se casó con Martínez de Careaga y nació Gonzalo.