La cantante Amaia Montero, en una imagen de archivo
El exitoso negocio de Amaia Montero lejos de la música y los escenarios
A la espera de que se confirma su regreso a La Oreja de Van Gogh, la cantante continúa muy pendiente de sus inversiones inmobiliarias
Ala espera de que se confirme de forma oficial el regreso de Amaia Montero a La Oreja de Van Gogh, siguen coleando las palabras de su íntima amiga Cayetana Guillén Cuervo, quien lo dio por hecho, en una alfombra roja. Tras pedir perdón por hablar demasiado y poner en juego el contrato millonario que maneja Sony, la actriz solo quiere pasar página.
Amaia, madrina del hijo de Cayetana, no se tomo nada bien esta indiscreción sin mala fe. La cantante dejó de seguir a su amiga en Instagram y, ahora, según informa Socialité, se estaría incluso planteando llevar el asunto a los tribunales. «Amaia se habría enfadado tanto que incluso se habría planteado tomar medidas judiciales, denunciar a Cayetana», explicaban en el programa de Telecinco. Un rumor no confirmado y bastante improbable, teniendo en cuenta que su amistad se remonta a hace más de 20 años.
Tras la reaparición de Amaia, en el concierto de Karol G, en julio y la salida de Leire Martínez del grupo, el nombre de la donostiarra suena con más fuerza que nunca. Aunque Amaia no ha confirmado nada, sus fans siguen esperando una respuesta. Recientemente, publicaba una nueva imagen en su Instagram con su perro fallecido.
Cayetana Guillén Cuervo ha pedido perdón a su amiga Amaia Montero
Y, claro, con tanto éxito, el dinero no ha faltado. Pero la artista vasca no solo ha ganado, también ha sabido invertir. Ha apostado por el mercado inmobiliario, comprando propiedades para generar ingresos pasivos y sacar provecho de su aumento de valor con el tiempo. En total, ha hecho tres inversiones destacadas que no solo son compras, sino jugadas maestras que muestran su astucia como empresaria.
Leire Martínez y Amaia Montero
En los primeros años de su carrera, Amaia Montero vio que la estabilidad financiera podía empezar cerca de su ciudad natal. Aunque nació en Irún, se decidió por San Sebastián, una de las ciudades más turísticas del País Vasco. Allí, compró en 1999 una vivienda en una buena zona, con tres habitaciones, dos baños y una terraza. Con 97 metros cuadrados, la inversión fue bastante accesible, pero hoy en día ese piso podría venderse por alrededor de 400.000 euros.
Solo un año después decidió seguir invirtiendo, esta vez con una jugada un poco más grande. Compró un terreno de 2.666 metros cuadrados justo enfrente de su piso. ¿El resultado? Un complejo deportivo que incluye una pista de tenis, piscina, frontón, vestuarios y un local social. A día de hoy, en este terreno ya no hace ninguna actividad.
En 2010, compró una propiedad en el exclusivo barrio de Salamanca en Madrid. Este piso tiene 289 metros cuadrados, cinco habitaciones y cinco baños. Desembolsó un millón de euros. Si quisiera venderlo hoy, podría obtener más del doble.
Sociedades a su nombre
La primera sociedad de Amaia Montero es La Oreja de Van Gogh S.L., creada en 1999 en Bilbao, cuando el grupo estaba en su mejor momento. Se encarga de crear, editar y vender música, discos, videos y fotos, además de representar a artistas. Según ABC, en 2022, su activo fue de 2,9 millones de euros, lo que muestra que la banda sigue siendo un gran negocio.
La segunda sociedad es Poquito a Poco S.L., que Amaia fundó cuando decidió emprender su carrera en solitario. Esta sociedad le permite gestionar su propia música. ¿En cifras? En 2023, alcanzó un activo de 2,3 millones de euros.
Por tanto, si sumamos las propiedades y las sociedades, podría tener un patrimonio total cercano a los 8 millones de euros.
