Así es por dentro el ático de Santos Cerdán en Chamberí

El exsecretario de Organización del PSOE, Santos Cerdán León, se sentaba a primera hora de la mañana del pasado lunes frente al magistrado del Tribunal Supremo Leopoldo Puente y, poco después, era enviado a prisión provisional, comunicada y sin fianza antes el riesgo de fuga y destrucción de pruebas tras ser acusado de los delitos de cohecho, organización criminal y tráfico de influencias. Pese a negar todo los hechos que le implican en la trama, según el magistrado, habría conformado una organización criminal orientada a obtener indebidamente premios económicos por la ilícita adjudicación de obra pública.

Sea como fuera, Santos Cerdán ha pasado su segunda noche en la cárcel madrileña de Soto del Real. Una prisión VIP por la cantidad de rostros conocidos que han pasado por sus celdas. A Rodrigo Rato, Bárcenas, Oriol Junqueras o Mario Conde, se une ahora el exnúmero 3 del PSOE. Tras someterse a los trámites habituales de toma de huellas, registro de pertenencias, revisión médica y entrega de productos higiénicas y de cama, fue trasladado a una celda del módulo 13, el apodado de los novatos, y en el que también estuvo Víctor de Aldama.

Atrás quedan las noches en ese ático confortable de 120 metros cuadrados en una de las mejores de zonas de Madrid y a escasos metros de la sede socialista de Ferraz. Dos habitaciones amplias, dos baños, un luminoso salón con cocina comunicada con y una espectacular terraza de 30 metros hacían las delicias de Cerdán en la calle Hilarión Eslava número 32, en el céntrico barrio de Chamberí.

Situado en un edificio de 70 años de antigüedad, fue reformado hace apenas dos años, convirtiendo esta última planta tan calurosa como luminosa en el refugio perfecto del político, su mujer, Francisca Muñoz Cano, y su hija, estudiante en una universidad privada católica.

El piso, que aparece mencionado en los papeles de la UCO y está siendo investigado, no es de su propiedad, sino que lo alquiló hace cinco meses para resguardarse del temporal mediático por su implicación en la trama del PSOE. El coste de alquiler ronda entre los 2.500 y los 3.000 euros mensuales, lo que hacía saltar las alarmas hace una semanas, cuando El Debate avanzó en exclusiva esta información.

Y es que el sueldo de Santos Cerdán como diputado era de 71.897 € al año repartidos en 14 pagas –alrededor de 3.400 € al mes–, tal y como se establece en las retribuciones del régimen económico y ayudas de los miembros de la Cámara, dentro del portal de transparencia del Congreso de los Diputados.

Precisamente en este también se puede consultar el patrimonio en manos del político. A su nombre aparece una vivienda en Navarra, su tierra natal, que adquirió en los años noventa. En esta ocasión, se decantó por una residencia de dos plantas con cocina, salón, tres dormitorios, aseo, baño y jardín, y a la que le hizo una reforma integral justo cuando Víctor de Aldama le entregó 15.000€. Además, tiene en propiedad un Volvo XC60 T6, vehículo de alta gama cuyo precio alcanza los 70.000 €.

Ahora, Santos Cerdán y su mujer Francisca Muñoz afrontan la etapa más dura de su vida junto a la única hija que han tenido. Una joven que, según apuntan varias fuentes del entorno, está devastada por la situación de su padre y está viendo cómo le afecta en el ámbito personal y estudiantil –se está formando en Medicina en una universidad privada católica, tal y como avanzó Vozpópuli.

Fueron ellas las primeras en visitarle en prisión y llevarle la ropa pertinente. A las puertas de esta vivienda en el centro de Madrid se agolparon los periodistas y, cuando las dos salieron a la calle, acompañadas de la hermana del político y el marido de esta, comenzaron a increparles. «Lo que tenéis que hacer es iros a la puerta de Ayuso», aseguraban. «No tenéis corazón, destrozando la vida de mi sobrina, de nosotros. No hay derecho para lo que estáis haciendo», apuntaban al abandonar el domicilio en un taxi camino al nuevo hogar provisional de Santos Cerdán.

Pese a que ha intentado evitarlo, Paqui se ha convertido en protagonista indirecta. La sevillana conoció en Navarra a su marido, su tierra natal, y allí se mudó para comenzar su vida en común. Mientras él despuntaba en política, ella trabajaba en una fábrica de los alrededores de Milagro, el pueblo en el que él creció. Sin embargo, un accidente laboral la convirtió, tal y como describió Santos Cerdán, en «pensionista por accidente», cobrando una paga mensual de 640 euros. Después también probó suerte en el PSOE, incurriendo en la lista del PSN en el puesto 10 en la localidad de Noáin.