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29 de abril de 2024

Xie Zhenhua, principal negociador climático chino

Xie Zhenhua, principal negociador climático chinoAFP

COP26

China y Estados Unidos, las dos naciones más contaminantes, se unen para frenar juntas la crisis climática

Los dos países anunciaron un acuerdo conjunto de cooperación climática durante la conferencia de la COP26

China y Estados Unidos se han puesto de acuerdo para impulsar su cooperación en temas de cambio climático durante la próxima década, en un anuncio sorpresa durante la conferencia del COP26 en Glasgow.
Las dos naciones con mayor emisión de CO2 del mundo se han comprometido a trabajar juntas en una declaración conjunta, que establece que ambas partes «recuerdan su firme compromiso de cooperar» para lograr el objetivo de 1.5 grados Celsius fijado el Tratado del Clima de París en 2015.
Pidieron un incremento en los esfuerzos para salvar la «enorme brecha» que aún existe entre la humanidad y ese objetivo. Los científicos dicen que limitar el aumento en la temperatura global a 1.5 grados Celsius ayudará a la tierra a evitar los peores impactos climáticos. Se compara a las temperaturas preindustriales.
En París en 2015, los líderes mundiales prometieron intentar evitar que el globo se calentase más de 1.5 grados a través de reducciones de sus emisiones de CO2 y metano.
El principal negociador climático chino, Xie Zhenhua, contó a los reporteros en la COP26 que en lo que respecta al calentamiento global «hay más afinidad entre China y Estados Unidos que divergencia».
Se espera que Joe Biden, presidente estadounidense, y su homólogo chino Xi Jinping se reúnan virtualmente la semana que viene. Los dos países se perfilan como rivales globales en un gran nombre de problemas. En la excepcional declaración conjunta, había etapas pactadas para progresar en varios sectores, tales como la reducción de emisiones de metano, la transición a las energías «limpias», y la «descarbonización».
Pero China ya se había negado a firmar el pasado acuerdo de limitar el metano, nocivo gas de invernadero. El pacto se firmó por otros 100 países, mientras que China prefirió desarrollar su propio «plan nacional» para frenar el metano.
John Kerry, el delegado climático de Estados Unidos, siguió a Xie para decir que «China y Estados Unidos tienen muchas diferencias, pero en lo que respecta al clima, la única forma de logarlo es a través de la cooperación».
«Ahora cada paso cuenta, y tenemos un largo camino por delante», añadió. 
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