Joe Biden, presidente de Estados Unidos, en Tokio
Biden advierte a Pekín: promete intervenir militarmente si China invade Taiwán
El presidente estadounidense da garantías a Taiwán de que lo defenderá para que no le pase lo mismo que a Ucrania con Rusia
Joe Bide da un paso adelante con Taiwán. El presidente de Estados Unidos, de visita oficial en Tokio como parte de su gira por Asia, prometió que su país defenderá militarmente a Taiwán si China se atreve a invadir su territorio.
Las declaraciones de Biden suponen un claro desafío para las tentaciones expansionistas de Pekín. Tanto Japón como Corea del Sur, los dos destinos asiáticos del viaje diplomático de Biden, son calificados por las autoridades estadounidenses como ejes de la ofensiva de Washington contra el creciente poderío comercial y militar de China. También son aliados en la alianza occidental para aislar a Rusia tras su agresión contra la vecina Ucrania.
Este escenario explica que, durante una rueda de prensa en la capital japonesa, Biden se enfrentara a una pregunta delicada y de extrema sensibilidad para Xi Jinping: ¿Defendería militarmente Washington a Taiwán, a pesar de no haberlo hecho en Ucrania?
«Sí, ese es el compromiso que hemos adquirido», fue la respuesta contundente y sin dudas del presidente estadounidense.
De pie junto a Fumio Kishida, primer ministro japonés, Biden explicó que era esencial responder duramente al «barbarismo» de Putin, para disuadir a China de sus intentos para unir Taiwán con el resto del país. China argumenta que la isla, de floreciente democracia y gobierno propio, les pertenece y debe volver a formar parte y someterse, en todos los aspectos, al régimen de Pekín.
«No es solo Ucrania. Si después de todo lo que ha hecho Putin, hay un acercamiento entre Rusia y Ucrania, y no continuamos con las sanciones… ¿Qué clase de señal estamos enviando a China sobre las consecuencias de intentar tomar Taiwán por la fuerza?», denunció Biden.
De momento, Estados Unidos suministra armamento a Taiwán, pero siempre evitó comprometerse a defenderlo de manera activa. Sin embargo, ya tenía pactos de ese estilo con Japón, Corea del Sur, y los países de la OTAN.
Esta ambigüedad estratégica se ha terminado. El mensaje ahora es cristalino: disuadir a Xi Jinping de aventuras expansionistas por la fuerza.
Frente al giro de Biden y sus recientes declaraciones, China no tardó en demostrar que no se siente amenazada. El ministerio de Asuntos Exteriores manifestó que estaba dispuesto a defender sus intereses nacionales sobre Taiwán.
«Nadie debería subestimar la sólida determinación, y fuerte habilidad del pueblo chino para defender su soberanía nacional y territorial», compartió uno de sus portavoces.
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