El canciller alemán Olaf Scholz durante su discurso en el Bundestag
371 días de guerra en Ucrania
Scholz reclama a China que no entregue armas a Rusia y que presione a Putin para que se retire de Ucrania
El canciller alemán, Olaf Scholz, pidió este jueves a China que no entregue armas a Rusia y use su influencia sobre Moscú para acabar con la guerra en Ucrania, con quien se debe contar para un eventual acuerdo de paz que no sea dictado a las autoridades en Kiev.
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El jefe del gobierno alemán, que viaja este jueves a Washington para abordar la situación en Ucrania junto con el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, realizó una declaración en la que pidió a Pekín que «no entreguen a Rusia ninguna arma ofensiva».
Ante el Bundestag, la cámara baja del Parlamento alemán, Scholz también pidió a China que emplee su influencia para presionar a Moscú para que retire sus tropas de Ucrania.
Scholz insistió en su discurso en que un acuerdo de paz no será posible si «pasa por la voluntad de los ucranianos».
El canciller advirtió de que «si Ucrania dejara de defenderse no habría paz alguna, más bien sería el fin de Ucrania». Y agregó: «Una paz dictada contra la voluntad de las víctimas no se plantea solo por razones morales, sino también porque consideramos el bienestar de nuestro país y la seguridad de Europa y del mundo».
Respecto a China, Scholz se felicitó de que sus gobernantes se hayan mostrado contrarios al empleo de armas nucleares, biológicas y químicas, y llamó a Pekín a compartir sus «ideas» sobre la paz en Ucrania «con los principales afectados, con los ucranianos y con el presidente Zelenski».
Asimismo, se mostró disgustado por el hecho de que China no haya expresado en la reciente reunión de los ministros de Finanzas del G-20 una «clara condena del ataque ruso».
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