Pedro Sánchez y Giorgia Meloni durante su encuentro en Roma
Sánchez intenta en Roma ganarse a Meloni para su presidencia en la Unión Europea
Son como el agua y el aceite, pero Pedro Sánchez está dispuesto a tratar de que Meloni no sea un problema mientras él presida, en este segundo semestre, la Unión Europea. El presidente del Gobierno llegó esta mañana a Roma con una agenda de asuntos en cartera para discutir la primera ministra italiana, Giorgia Meloni.
Con este viaje, Sánchez cierra su gira previa a la presidencia de la Unión Europea en el segundo semestre de este año, después de visitar esta semana Chipre, Malta e Italia.
El avión de las Fuerzas Aéreas Españolas en el que se desplazó el presidente desde La Valeta, tras reunirse la con el primer ministro de Malta, Robert Abela, llegó a media mañana al aeropuerto romano de Ciampino.
Desde allí se trasladó hasta el Palacio Chigi, sede del Gobierno italiano, para su encuentro con Meloni y tras el que, por decisión del país anfitrión, no habrá rueda de prensa conjunta y sí una declaración sin preguntas.
Las diferencias ideológicas entre Sánchez y Meloni, líder de la conservadora formación Fratelli d'Italia, son enormes, pero desde el Gobierno español se subraya que las relaciones entre los países trascienden los líderes que puedan estar al frente de ellos en cada momento y que los italianos han decidido democráticamente quién quiere que les gobierne.
Pese a esas diferencias, Sánchez aspira a que Meloni pueda contribuir al consenso en asuntos que van a ser objeto de debate y negociación durante la presidencia española de la UE, entre ellos el Pacto sobre Migración y Asilo que el bloque se ha comprometido a aprobar antes de que el próximo año se celebren las elecciones a la Eurocámara.
Sánchez llega a Roma con el apoyo explícito de Chipre y Malta a su apuesta por un pacto migratorio que tenga como elemento fundamental la dimensión exterior de este problema, la ayuda a los países origen y el tránsito de la migración.
Considera que debe haber también un equilibrio entre la responsabilidad y la solidaridad, y que hay que tender puentes para evitar los bloques de países con posiciones contrapuestas.
Sánchez espera conocer la posición de Meloni sobre este asunto y sobre otros que estarán muy presentes durante la presidencia española de la UE, como el refuerzo de la autonomía estratégica abierta y la competitividad y la reforma del mercado de la electricidad.
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