El fundador del grupo Wagner, mercenarios al servicio del Kremlin, con tatuajes pronazis
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¿Quién era Dmitry Utkin? El «terminator» neonazi y número dos de Wagner que murió junto a Prigozhin
Menos mediático que Prigozhin, Dmitry Utkin fue el ideólogo del Grupo Wagner, al que cedió su propio nombre en clave
Si el fallecido Yevgeny Prigozhin era la imagen pública del Grupo Wagner, Dmitry Utkin era el comandante en la sombra.
Ambos fundaron el grupo en el año 2013 y ambos fallecieron el miércoles en un avión presuntamente derribado por orden del Kremlin.
546 días de guerra en Ucrania
La última maniobra de Prigozhin que acabó con la paciencia del Kremlin y precipitó su desenlace
Utkin era la verdadera alma del Grupo Wagner. Huía de los focos y las cámaras, y por eso no era tan conocido como Prigozhin.
Pero la empresa de mercenarios al servicio del Kremlin salió de su mente. De hecho, el nombre Wagner era su propio nombre de combate, por su admiración del compositor favorito de Hitler, que luego otorgó al Grupo de Mercenarios.
Utkin estaba obsesionado con el nazismo, admiraba la Alemania del Tercer Reich y se hizo tatuar en el cuerpo esvásticas nazis, águilas del Reich y el emblema de las SS hitlerianas.
Dmitry Utkin
Las fotografías difundidas de él sin camiseta luciendo sus tatuajes nazis, o con ropa militar, y siempre mirada inexpresiva al frente y rictus agresivo, le valieron su apodo de «terminator».
A diferencia de Prigozhin, Utkin, nacido en 1970, tenía experiencia militar. Sirvió como oficial del servicio de inteligencia militar (GRU), combatió en la guerra de Chechenia y en la de Siria. También participó en la ocupación de Crimea en 2014 y en la guerra del Dombás en 2015.
Según señala el diario The Guardian, durante 10 años estuvo integrado en la Segunda Brigada Spetsnaz como comandante. Luego, a finales de la primera década de los 2000, se retiró del Ejército.
Fue condecorado con cuatro Órdenes de Coraje y alcanzó el grado de teniente coronel.
Sin embargo, sentía la necesidad de volver al combate y entonces se le ocurrió construir una fuerza de mercenarios para combatir en el extranjero al servicio de los intereses de Moscú.
Allí donde Putin no pudiera mancharse las manos públicamente, se las mancharía él. Para fundar el grupo contó con la imprescindible ayuda de Prigozhin, que puso la financiación y los contactos por medio de su empresa Concord Group.
Utkin ha sido acusado de crímenes de guerra, y ha sido sancionado por el Reino Unido y la Unión Europea por su participación en la guerra de Ucrania. Entre los crímenes que se le atribuyen están el asesinato y ejecución extrajudicial y la tortura.
Con el estallido de la guerra, las operaciones del Grupo Wagner en Ucrania corrieron a cargo de Prigozhin, mientras que Utkin se mantuvo como responsable del grupo en África.
En el momento de su muert, ambos se encontraban impulsando una nueva fase de desarrollo del Grupo Wagner centrada en África para compensar la pérdida de influencia en Europa.
Ese intento de resucitar marcó su destino. La inteligencia rusa se quitó a ambos de en medio y despejó así el camino para desmantelar definitivamente las estructuras del Grupo Wagner.
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