El candidato oficialista contrario a Pekín gana la presidencia de Taiwán con un 41,9 % de los votos
Lai Ching-te es considerado por China como un «peligro» debido a sus posiciones a favor de la independencia de la isla
El candidato a presidente de Taiwán del gobernante Partido Democrático Progresista (PDP), William Lai (Lai Ching-te), lidera el recuento con un 41,9 % de los votos con ya más del 90 % de los colegios electorales escrutados, según datos de la Comisión Electoral Central (CEC).
Ya entrada la noche en Taiwán, Lai Ching-te actual vicepresidente de la isla, superaba a su principal adversario, Hou Yu-ih, candidato de Kuomintang (KMT) que preconiza un acercamiento con Pekín, quien logró un 33,2 % de los votos.
Según los resultados, la participación en el proceso electoral se describió como positiva, alcanzando el 70 % en ciudades como Taipéi, Tainan y Taoyuan.
Estas elecciones se celebraron a la sombra de las amenazas de China, que advirtió que elegir al líder equivocado podría preparar el terreno para una guerra, y son seguidas de cerca desde Estados Unidos, principal sostén y proveedor militar de la isla.
En vísperas de la votación, Pekín instó a los taiwaneses a tomar «la decisión correcta» si quieren evitar la guerra y describió a Lai Ching-te como un peligroso «separatista».
En Washington, el jefe de la diplomacia estadounidense, Antony Blinken, reunido con un dirigente del Partido Comunista Chino, instó a Pekín a «mantener la paz y la estabilidad» durante los comicios.
El estatus de Taiwán, donde viven 23 millones de personas, es uno de los asuntos más espinosos de la rivalidad entre China y Estados Unidos, que compiten por la influencia en esta región estratégica.
Candidato opositor reconoce la derrota
El candidato del principal partido de la oposición en Taiwán, el Kuomintang, favorable a un acercamiento con China, admitió su derrota en la elección presidencial.
«Respeto la decisión final del pueblo taiwanés» y «felicito a Lai Ching-te (candidato rival) y a Hsiao Bi-khim (compañera de lista) por su elección», declaró Hou Yuh-ih a sus seguidores.
Tras lo resultados y las felicitaciones de sus contendientes, Lai Ching-te, prometió defender la isla de gobierno democrático de las «intimidaciones» de Pekín, que no descarta recurrir a la fuerza algún día para recuperar un territorio que considera suyo.
«Estamos decididos a proteger Taiwán de las intimidaciones y amenazas continuadas de China», dijo en su discurso de la victoria, en el que se comprometió también a mantener la paz y la estabilidad en el Estrecho de Taiwán.