Fundado en 1910
Oficiales de policía durante la redada en Palermo

Oficiales de policía durante la redada en PalermoEFE

Macroredada contra la mafia en Italia: 183 detenidos, el mayor número en 40 años

Los detenidos en la maxioperación están acusados de asociación criminal de tipo mafioso, intento de homicidio, extorsión agravada con métodos mafiosos, tráfico de drogas, uso y posesión de armas y juego ilegal

Un total de 183 personas han sido arrestadas este martes en Palermo, la capital de Sicilia (Italia), en una importante operación de las fuerzas de seguridad que ha desarticulado un nuevo intento de reconstruir la cúpula de Cosa Nostra, la mafia siciliana, en esta provincia.

La operación, una de las más grandes de los últimos años —la Cosa Nostra no recibía un golpe similar desde 1984, cuando sufrió 366 arrestos—, refleja un doble fenómeno: por un lado, la persistencia del crimen organizado en su lucha por recuperar influencia, y por otro, la firmeza del Estado italiano en su combate contra la mafia.

Los detenidos en la maxioperación, en la que participaron 1.200 carabineros, están acusados de asociación criminal de tipo mafioso, intento de homicidio, extorsión agravada con métodos mafiosos, tráfico de drogas, uso y posesión de armas y juego ilegal, informó la policía militarizada.

La investigación llevada a cabo por los carabineros, y coordinada por los fiscales Maurizio de Lucia y Marzia Sabella, ha mostrado el enésimo intento de organizar una cúpula de Cosa Nostra en Palermo y las alianzas cada vez más estrechas de la mafia siciliana con la 'Ndrangheta, la mafia de Calabria (sur).

Los protagonistas de la última reorganización son una vez más los jefes liberados tras los años pasados en prisión, como Tommaso Lo Presti, Nunzio Serio, Guglielmo Rubino y Cristian Cinà, entre otros.

El Fiscal Maurizio de Lucia (3R), el Fiscal Giovanni Melillo (C) y el Comandante Carabinieri Luciano Magrini (3L) asisten a una conferencia de prensa en Palermo, Sicilia, Italia, el 11 de febrero de 2025. Durante una operación antimafia el 11 de febrero, la policía italiana arrestó a 181 presuntos miembros de cosa Nostra.

El fiscal Maurizio de Lucia, el fiscal Giovanni Melillo y el Comandante Carabinieri Luciano Magrini asisten a una conferencia de prensa en PalermoEFE

Sin embargo, el fenómeno más preocupante señalado por la fiscalía es la captación de jóvenes en las periferias, donde la falta de oportunidades convierte a la mafia en una alternativa tentadora. «Cosa Nostra sigue ejerciendo su encanto en ciertos ambientes», advirtió el fiscal de Palermo, Maurizio de Lucia. La mafia, más que una organización, sigue siendo una cultura que encuentra en la exclusión social su caldo de cultivo.

Organizar el crimen desde la cárcel

Las pesquisas localizaron la presencia de teléfonos móviles encriptados en las cárceles, donde los jefes mafiosos detenidos, gracias a dispositivos altamente sofisticados, podían comunicarse con el exterior e incluso organizar cumbres por videollamada.

Gracias a los teléfonos móviles, los padrinos pudieron crear auténticos chats grupales con otros mafiosos, algunos libres, otros en prisión, para hablar tranquilamente de sus negocios, según los medios locales.

La investigación reveló que un jefe de la mafia de Porta Nuova que se encuentra en prisón, Calogero Lo Presti, llegó incluso a ordenar a través de un móvil que se propinara una paliza y luego presenció la emboscada con una videollamada.

En las páginas de los documentos de la investigación se habla también de la nostalgia de los nuevos padrinos por la mafia y los jefes de la Cosa Nostra del pasado: “El nivel es bajo, hoy detienen a uno y se arrepiente, pero ¿de qué estamos hablando?", dice el jefe del barrio de Brancaccio, Giancarlo Romano, sin saber que estaba siendo interceptado.

Asimismo, la investigación revela la imposición de la extorsión generalizada, como en el caso de uno de los jefes mafiosos liberados que impuso sus productos de pescado en los restaurantes de los pueblos costeros de Sferracavallo y Mondello.

Italia no baja la guardia

Las autoridades han sido tajantes al afirmar que, aunque Cosa Nostra intenta resurgir, no ha logrado reconstituirse como en el pasado. El fiscal de Palermo sostiene que los jefes de la mafia «no han abandonado el viejo sueño» de reorganizar su poder, pero cada intento se ve frustrado por la acción del Estado.

La primera ministra, Giorgia Meloni, ha aprovechado la operación para subrayar el éxito del Gobierno en la lucha contra el crimen organizado. Citando las escuchas de los propios mafiosos, que reconocen que «Italia se ha convertido en un obstáculo» para sus negocios, Meloni asegura que «el crimen organizado está contra las cuerdas».

Sin embargo, la historia de la mafia en Italia demuestra que su erradicación nunca ha sido sencilla. La caída de un jefe solo deja espacio para otro. La pregunta es si el Estado, con su persistente ofensiva, logrará romper el ciclo o si la Cosa Nostra, con su capacidad de adaptación, encontrará la manera de reinventarse una vez más.

Temas

comentarios
tracking