Una calle de una zona residencial gravemente dañada de Kostyantynivka, ciudad en primera línea de la región de Donetsk
Putin presume de avances en Ucrania en plenas negociaciones de paz: ¿controla realmente Kúpiansk y Pokrovsk?
En el frente ucraniano actualmente se libran dos batallas que pueden marcar el curso de las negociaciones de paz, auspiciadas por Estados Unidos, para poner fin a la invasión rusa tras casi cuatro años. Kúpiansk (región de Járkov) y Pokrovsk (Donetsk) se han convertido en las ciudades que representan tanto la resistencia ucraniana como el avance ruso. Mientras Kiev trata de resistir y recuperar el mayor terreno posible para demostrar a Washington que todavía no está todo dicho en la línea del frente, Moscú quiere vender un avance rápido que no se corresponde con la realidad.
Durante su maratoniana rueda de prensa anual la pasada semana, el autócrata ruso, Vladimir Putin, aseguró que las tropas rusas avanzan en todos los frentes. «Como es sabido, la ciudad de Kúpiansk quedó bajo nuestro control hace varias semanas. Nuestras tropas controlan la ciudad», insistió el inquilino del Kremlin, que aprovechó para ridiculizar al presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, quien días antes se había grabado en esta ciudad de la región de Járkov para desmentir la información de Moscú. «Zelenski es un artista talentoso, lo digo sin ninguna ironía», comentó Putin el pasado jueves, dando a entender que la grabación era un montaje.
La estrategia del Kremlin es hacer creer al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, que tarde o temprano su Ejército acabará haciéndose con el territorio que reclama en las negociaciones para poner fin a la guerra. Sin embargo, Kiev resiste y asegura que ha logrado recuperar el control del 90 % de Kúpiansk. «Gracias a las operaciones activas de detección y ataque hemos conseguido expulsar a los ocupantes de Kúpiansk y tomar el control de casi el 90 % del territorio de la ciudad», aseguró la semana pasada el comandante en jefe de las Fuerzas Armadas de Ucrania, Oleksandr Sirski. Así, varios medios internacionales como el Financial Times o The Washington Post advierten de que Putin podría estar haciendo declaraciones basándose en informes militares que «exageran las bajas ucranianas en el campo de batalla, destacan las ventajas de Rusia en cuanto a recursos y minimizan los fracasos tácticos».
El presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, en Kúpiansk el 12 de diciembre de 202
La realidad en el terreno no es tan ventajosa como quieren hacer ver desde Moscú. La ciudad de Kúpiansk, como coinciden tanto el portal de análisis DeepState como el think tank Instituto para el Estudio de la Guerra (ISW, por sus siglas en inglés), está actualmente bajo el control del Ejército ucraniano. Según informa el ISW, las fuerzas rusas mantienen sus operaciones ofensivas en dirección a la urbe, pero sin grandes avances. El portavoz de la Fuerza Operativa Conjunta de Ucrania, el coronel Viktor Trehubov, señaló este lunes que el Ejército del país invadido sigue despejando los alrededores de Kúpiansk y aseguró que las brigadas rusas que aún quedan en el interior de la urbe están completamente rodeadas, carecen de alimentos y se están quedando sin armas ni municiones.
En Pokrovsk, óblast de Donetsk, la situación, sin embargo, es mucho más adversa para los ucranianos. Putin, en su rueda de prensa de la semana pasada, insistió también en que las fuerzas rusas controlan el 50 % de la ciudad de Mirnograd, a menos de nueve kilómetros de Pokrovsk. «El enemigo no ha recibido órdenes ni permiso para deponer las armas y está intentando escapar del cerco en pequeños grupos», comentó el inquilino del Kremlin. A pesar del avance ruso, el Ejército ucraniano sigue resistiendo en este bastión clave de Donetsk y, según imágenes geolocalizadas recogidas por el ISW este lunes, las fuerzas de Kiev han logrado avanzar a lo largo de la carretera E-50 Pokrovsk-Pavlohrad, al noroeste de Pokrovsk, donde continúan los combates.
Sin embargo, este martes, el Ejército ucraniano reconoció que se había retirado de la ciudad de Siversk (Donetsk), con el fin de «preservar las vidas de nuestros soldados». En definitiva, Moscú asegura que en este año 2025 ha tomado más de 300 localidades en Ucrania, es decir, «más de 6.300 kilómetros cuadrados», datos que expertos independientes desmienten por completo y reducen esas estimaciones a menos del 1 % del territorio ucraniano invadido por el Ejército ruso este último año. La situación en el terreno, y lo que cada bando logre ganar o resistir, es determinante para el desenlace de las negociaciones que se han sucedido estos días en Estados Unidos. Zelenski se ha mostrado optimista y ha declarado que las conversaciones indirectas con Rusia estaban «muy cerca de un resultado real», a falta de que Putin se pronuncie sobre el último borrador del plan de paz de 20 puntos.