Mohamed VI durante uno de sus innumerables paseos en descapotable por Marruecos
Golden cars
La imponente colección de coches del rey Mohamed VI de Marruecos
Su abuelo Mohamed V inició la colección con varios Ford de los años 20, una muestra que siguió Hassan II con inmensos Mercedes de lujo y que ha culminado Mohamed VI con decenas de deportivos
Cuenta la leyenda que era relativamente habitual encontrarse por las calles de Rabat con el rey Mohamed VI sin escolta al volante de alguna de las piezas de su imponente colección de coches, que está compuesta por más de 600 vehículos que tiene distribuidos por sus 12 palacios reales y que cuidan con mimo más de un centenar de operarios.
Una leyenda regia
Al parecer fue su padre, Hassan II, quien inculcó a su hijo su amor por los automóviles cuando le regaló un Jeep de juguete con motor con el que era habitual verle por los jardines de palacio.
Mohamed VI con el Jeep de juguete en palacio
La colección de coches comenzó con su abuelo, Mohamed V, que ya en su época era un amante de los automóviles norteamericanos acumulando varios Ford, Cadillac y Rolls Royce británicos que aún conservan en perfecto estado. Una colección que continuó Hassan II con innumerables Mercedes y que ha actualizado Mohamed VI con los mejores deportivos del mundo.
Deportivos muy potentes
De hecho, fuentes de palacio explican que ante la dificultad de conducir pequeños deportivos de Ferrari o Porsche, su tamaño no se lo permitía, Mohamed VI optó por coches deportivos más amplios como los Mercedes, Jaguar o Aston Martin.
Mohamed VI al volante de uno de sus Rolls en Rabat
Estas mismas fuentes cuentan que el rey habría visitado en varias ocasiones la central de Ferrari en Maranello para probar modelos como los 550 o 360 Modena en la pista de pruebas de la marca y siempre como copiloto de alguno de los pilotos de renombre de la firma del Cavallino.
Pese a ello el rey de Marruecos ha sido siempre un fiel seguidor de la firma de la estrella como su padre, y en su garaje guarda piezas como un Mercedes McLaren SLR del que sólo se hicieron 1.700 unidades.
Mohammed al volante de un Mercedes E descapotable personalizado en Marruecos
Aston Martin es otra de las marcas preferidas del monarca, hasta el punto de que enviaba su DB7 al Reino Unido en un avión de la fuerza aérea de Marruecos para sus reparaciones y revisiones. Su colección tendría también un Aston Vanquish Volante y un Lexus SC430.
Su Aston Martin DB7 toma tierra en el Reino Unido
Numerosos todoterreno también forman parte de la misma, de hecho se le ha visto en numerosas ocasiones al volante de Range Rover Sport Supercharged y de un Vogue, incluso haciendo dunas.
Los todoterreno son otra de sus pasiones
La colección contiene varias unidades de Mercedes SL 600 Pullman que se usan habitualmente en actos oficiales, limusinas con seis puertas que Hassan II mandaba renovar cada cinco años. Estos vehículos están blindados y tienen un motor de 12 cilindros.
Uno de los Mercedes SL 600 Pullman de Mohamed VI en acto oficial
Su colección se completó recientemente con las dos únicas unidades que existen del Laraki Sahara, un superdeportivo fabricado en Marruecos con motor de 12 cilindros y 1.500 caballos que cuesta 2 millones de dólares.
Laraki Sahara, uno de sus caprichos más recientes
Cuentan una anécdota que uno de sus mayores enfados del monarca tuvo lugar cuando Jaguar decidió obsequiarle con uno de sus últimos modelos y le mandó un XJ por carretera desde la fábrica en el Reino Unido hasta Marruecos, cuando lo recibió simplemente dijo que no aceptaba coches de segunda mano.
De hecho es muy habitual encontrarse en redes sociales con vídeos grabados en Marruecos en los que puede verse una caravanas de coches de lujo con Mohamed VI al frente.
