
Las ZFE funcionan ya en 25 ciudades francesas
Práctico
Las Zonas de Bajas Emisiones en el aire: Francia vota su eliminación por discriminar a las rentas más bajas
París y Lyon son las ciudades más afectadas, pues la calidad del aire es muy mala y serían las más afectadas por la retirada de las ZBE
La asociación 40 Millones de Automovilistas resumía lo ocurrido en el país vecino como «una gran victoria de los automovilistas» y es que Francia puede convertirse en el primer país europeo que elimina por completo las Zonas de Bajas Emisiones, ZBE en el país galo, de todas sus ciudades.
Pese al retraso respecto al calendario previsto, pues es el país de Europa en el que su implantación va más lenta, a día de hoy las ZBE están en funcionamiento en 25 ciudades francesas, aunque solo multan en París y Lyon, donde la calidad del aire es muy deficiente.
Calidad del aire deficiente
Hoy era el día clave para las mismas, pues la Asamblea Nacional votaba en un comité especial un proyecto de ley de simplificación de las ZBE por un motivo muy sencillo pero tremendamente poderoso en Francia: «las Zonas de Bajas Emisiones son discriminatorias para los hogares con bajos ingresos».

Las ZFE han sido calificadas como discriminatorias
Aún falta el Parlamento
Esta votación inicial se convertirá en un proyecto de ley que votarán el Parlamento el próximo 8 de abril, donde podría aprobarse definitivamente la eliminación de estas Zonas de Bajas Emisiones.
La propuesta salió adelante con el apoyo de los diputados republicanos y de la Agrupación Nacional, a los que se sumaron algunos miembros del bloque macronista.

El equivalente a las etiquetas francesas
Según informan medios franceses como Le Parisien, tanto Emmanuel Macron como los ministros de Transición Ecológica e Industria y Energía han salido rápidamente en su apoyo, basando su defensa en la salud pública, pues las emisiones generan cada año más de 40.000 muertes en Francia.
Confirmando que en caso de que el Parlamento finalmente las anulara el Gobierno de Macron ya ha comunicado que se pondrían a trabajar para volverlas a poner en vigor, aunque con una aplicación más progresiva y menos traumática.