Los perros son imprescindibles para registrar coches
Práctico
El escondite de los coches que la Policía ha tardado años en descubrir: no lo encuentran ni los perros
La Policía reconoce que en ocasiones no se lo ponen nada fácil al registrar un coche, aunque hay determinados sitios donde siempre mira
Año a año se multiplican exponencialmente el número de controles preventivos de carretera, para hacernos una idea al año se llevan a cabo más de siete millones de controles de alcoholemia, a lo que hay que sumar los controles de documentación, los rutinarios, los identificativos...
Durante su formación los guardia civiles reciben claves para detectar determinados indicios que pueden sacar a la luz un delito, por ejemplo hace no mucho que un agente de tráfico confesaba que el suele fiarse mucho de detalles como si el conductor lleva gorra o gafas de sol cuando para a alguien en un control y no suele equivocarse.
Indicios certeros
En los casos en los que las sospechas van a mayores es habitual que procedan a registrar los vehículos, pues es la prueba de fuego en la que suelen encontrarse con alguna que otra sorpresa.
El depósito del agua de los limpias...
En este caso hay dos escondites que suelen ser bastante habituales para transportar drogas, joyas u objetos robados. Se trata de lugares muy bien pensados y que además evitan también el olfato de los perros, pues hay una serie de olores muy potentes que enmascaran el olor de las drogas.
Adiós al olfato
Uno de ellos es el tapón de la gasolina, al abrir la tapa que está en la carrocería queda siempre un hueco perfecto para ocultar cualquier objeto no muy grande y lógicamente el olor a combustible hace imposible que los perros lo descubran.
El tapó del combustible, un viejo conocido para la Policía
De hecho la Policía se ha encontrado con algunos pequeños camellos que esconden la droga en dosis ya separadas atadas a un sedal de pescar que entra por la boca del depósito, de manera que solo queda a la vista la punta de un sedal que casi es imposible de ver.
Otro de los escondites más habituales es el depósito de líquido del limpiaparabrisas, suele tener un filtro a la entrada que evita que lo que dejemos se caiga al depósito y el olor de cualquier sustancia prohibida queda enmascarado por el detergente.