El sulforafano presente en las crudíferas inhibe la replicación del SARS-CoV-2, según un nuevo estudio
Salud y nutrición
El consumo de brócoli frena la covid y el virus del catarro
El sulforafano, presente en esta verdura, posee un fuerte defensivo en las vías respiratorias
El brócoli es una verdura saludable y que aporta importantes y numerosos beneficios a nuestro organismo.
Pero en los últimos tiempos de pandemia, está empezando a ser especialmente valorado por el sulforafano, lo que en círculos médicos se conocía como su ‘molécula anticáncer’.
Así, el brócoli puede ser un estupendo aliado contra la prevención tanto del catarro común como de la covid gracias a una combinación de su elevada cantidad en vitamina C, que refuerzan nuestro sistema inmune, y el mencionado sulforafano, que posee un fuerte efecto defensivo en las vías respiratorias.
Una investigación publicada recientemente por la revista científica Nature Communications Biology, que ha sido dirigida por investigadores del John Hopkins Children’s Center.
En análisis previos, se concluyó que el sulforafano poseía propiedades para prevenir los tumores malignos y las infecciones, porque interfiere en procesos celulares. La novedad es que este compuesto también sería capaz de inhibir la replicación del SARS-CoV-2 y otros coronavirus.
En concreto, el sulforafano inhibe el factor nuclear kappa B y el inflamasoma NLRP3, disminuyendo la posibilidad de tormenta de citoquinas que en ocasiones produce esta infección.
Recomendaciones de consumo
La cantidad recomendada de brócoli que aporte la cantidad suficiente de vitaminas y minerales y los beneficios ya nombrados, es de 200 gramos por ración.
La cantidad de esta verdura que puede ser recomendada para producir un efecto protector en algunos tipos de cáncer sería de unos 30 gramos diarios.
Tampoco hay que excederse. El consumo excesivo de crucíferas, por su alto contenido en isotiocianatos, que son sustancias bociógenas (interfieren en la utilización del yodo por el organismo), puede resultar perjudicial en personas con bajas ingestas de yodo.
La cantidad de esta verdura que puede ser recomendada para producir un efecto protector en algunos tipos de cáncer sería de unos 30 gramos diarios.
Tampoco hay que excederse. El consumo excesivo de crucíferas, por su alto contenido en isotiocianatos, que son sustancias bociógenas (interfieren en la utilización del yodo por el organismo), puede resultar perjudicial en personas con bajas ingestas de yodo.
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