Garrapata

GarrapataSOS LYME

Salud

Un experto advierte sobre los peligros de las garrapatas: Pueden dejarte secuelas de por vida»

Pueden transmitir la enfermedad de Lyme, pasar desapercibidas durante días y dejar secuelas irreversibles si no se extraen correctamente

En los últimos tiempos, las garrapatas han cobrado relevancia en el ámbito de la salud pública, especialmente tras la aparición de un video viral de Miguel Assal, reconocido experto en gestión de emergencias y divulgador de contenido en redes. En una atractiva entrevista con Jordi Wild en el podcast The Wild Project, Assal expone los riesgos y la prevención que debemos tener en cuenta al estar en contacto con estos parásitos.

¿Por qué son peligrosas las garrapatas?

Las garrapatas, esos pequeños artrópodos, son más peligrosas de lo que muchos podríamos pensar. Assal destaca que, al engancharse, lo hacen de manera tan sutil que a menudo no lo notamos. A diferencia de una picadura de mosquito, la garrapata se adhiere a la piel sin causar dolor, lo que las convierte en un enemigo sigiloso.

Este experto explica que su presencia es particularmente común en áreas de pastoreo y helechos, donde han podido alimentarse de la sangre de animales. Es aquí donde la amenaza se intensifica, ya que pueden ser vectores de enfermedades graves, como la enfermedad de Lyme. Aunque no todas las garrapatas son portadoras de esta infección, el riesgo aumenta en áreas propensas a su proliferación.

Cómo identificar y actuar ante una garrapata

Identificar una garrapata es crucial para evitar complicaciones. Una vez que se adhieren a nuestro cuerpo, buscan zonas cálidas, como detrás de las orejas o en las axilas, donde pueden alimentarse sin ser detectadas. Cuando se enganchan, pueden crecer hasta parecer pequeñas canicas si no se retiran a tiempo.

Assal enfatiza que la extracción debe hacerse con cuidado. La recomendación principal es no arrancarlas de forma brusca; en su método, el uso de pinzas finas y planas es fundamental. Debemos agarrar la garrapata desde la base, lo más cerca posible de la piel, tirando tranquilamente hacia arriba y sin girar, para evitar dejar parte de su cabeza dentro. Esta práctica ayuda a prevenir infecciones y asegura que no se liberen patógenos en nuestro flujo sanguíneo.

En caso de encontrar una marca roja en forma de diana o experimentar síntomas como fiebre, es esencial visitar al médico rápidamente, ya que estos signos pueden indicar una infección por Lyme. Assal también destaca que algunos pueden experimentar síntomas de esta enfermedad durante años sin ser diagnosticados, lo que refuerza la importancia de estar alerta.

Temas

comentarios
tracking

Compartir

Herramientas