La directora de cine Carla Simón posa con su Oso de Oro del Festival de Cine de Berlín
Cine
Las directoras copan el palmarés de los grandes festivales
El triunfo de la española Carla Simón en Berlín se une a los de Julia Ducournau en Cannes, Audrey Diwan en Venecia y la rumana Alina Grigora en San Sebastián
Es el tiempo de las mujeres en los principales festivales del mundo. El triunfo de la española Carla Simón en Berlín completa un Grand Slam femenino de tipo cinematográfico: Palma de Oro, León de Oro, Concha de Oro y Oso de Oro. Son cuatro triunfadoras nacidas en los años 80.
La serie empezó con Julia Ducournau (París, 1983) el pasado julio en el festival más prestigioso del mundo. Van 75 ediciones de Cannes y se convirtió en la segunda directora cuya película logra la Palma de Oro. Lo consiguió con la polémica Titane (disponible ahora en Amazon Prime), una película a lo David Cronenberg, transgesora y polémica que mezcla sexo, música y violencia extrema. Por cierto, la primera que logró ese galardón fue Jane Campion, de la que hablaremos también más adelante: lo hizo en 1993 por la soberbia El piano, que compartió premio con la magistral Adiós a mi concubina, de Chen Kaige.
La racha tuvo continuidad en septiembre en el Festival de Venecia. Esta vez el premio principal, el León de Oro, fue a parar a El acontecimiento, dirigida por Audrey Diwan, francesa de origen libanés nacida en 1980. Cuenta la historia de una brillante estudiante que se queda embarazada en 1963. Diwan superó a Fue la mano de Dios, la magnífica película de un Paolo Sorrentino que jugaba en casa. En esa misma edición, la neozelandesa Jane Campion se llevó el premio a la mejor dirección por El poder del perro (disponible en Netflix, que la produce). Diwan sucedió a Chloé Zhao, que el año anterior se había llevado el Oso de Oro por Nomadland.
La siguiente cita festivalera fue en San Sebastián, cuyo jurado oficial estuvo presidido por la georgiana Dea Kulumbegashvili, que en 2020 había logrado un triplete en la ciudad vasca con Beginning: Concha de Oro a la mejor película, Concha de Plata a la mejor dirección y premio del jurado al mejor guion. El palmarés de este año estuvo copado por mujeres: Concha de Oro para Crai nou / Blue Moon, opera prima de la rumana Alina Grigore (Bucarest, 1984); Concha de Plata a la mejor dirección para la danesa Tea Lindeburg (As in Heaven); Concha de Plata a mejor interpretación principal a la danesa Flora Ofelia (As in Heaven) y a la estadounidense Jessica Chastain (Los ojos de Tammy Faye); y Premio Especial del Jurado para Earwig, de la francesa Lucile Hadzihalilovic.
Crai nou / Blue Moon es una película que «sigue la evolución psicológica de una joven hacia su proceso de deshumanización. Intenta luchar para conseguir una educación superior y escapar de la violencia de su disfuncional familia», según la sinopsis facilitada por el festival donostiarra.
Y así llegamos hasta la catalana Carla Simón (Barcelona, 1986), que estos días ha recogido en Berlín el Oso de Oro a la mejor película por Alcarràs. En los títulos de crédito de la película hay muchas más mujeres: cinco en la producción (Ariadna Dot, Emilia Fort, Elisa Sirvent, Carla Sospedra y María Zamora), Andrea Koch (música), Daniela Cajías (fotografía), Ana Pfaff (montaje), Mireia Juárez (casting), Mónica Bernuy (arte), Marta Bazaco (decoración), Anna Aguilà (vestuario), Giovanna Turco (maquillaje), Eva Valiño (sonido)…
En el horizonte se vislumbra otro gran premio para una directora, no ya en un festival, sino en la gala más esperada del año, la de los Oscar. La gran favorita, que acapara doce nominaciones, es El poder del perro, de la neozelandesa Jane Campion.
En 1994 ya estuvo nominada a mejor directora por El piano, pero fue batida por Spielberg y su magistral La lista de Schindler. Si gana, será la tercera mujer directora que reciba la estatuilla dorada, tras Kathryn Bigelow (en 2010, por En tierra hostil) y Chloé Zhao (el pasado año, por Nomadland).
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