'La Virgen y el Niño con una flor en un banco de hierba', el dibujo que podría ser un originar de Alberto Durero
Un dibujo adquirido en subasta por 26 euros podría ser un Durero... y valer 50 millones
La anotación es clara: «#8907 Alberto Durero, dibujo de Virgen con Niño (?), 30 dólares». Así reza la entrada en el inventario de un coleccionista de antigüedades de Massachusetts. Un hombre de 60 años lo había adquirido en una venta de saldos de una propiedad inmobiliaria en la ciudad de Concord y lo había guardado durante años en su casa. A pesar de que no parecía tener valor, lo compró, por los 30 dólares (26 euros) que le pidieron.
El coleccionista guardó la obra sin que ni él ni quien se lo había vendido, las hijas del fallecido arquitecto Jean-Paul Carlhian, repararan en que el cuadro llevaba el símbolo 'AD' con el que firmaba sus obras el artista alemán Alberto Durero. Ahora, expertos historiadores del arte creen que podría tratarse realmente de un dibujo original del pintor alemán renacentista Alberto Durero. El boceto, dibujado con lápiz y tinta, es menor que un A4, y tiene por título La Virgen y el Niño con una flor en un banco de hierba.
El dibujo enmarcado, a la venta en la Agnews Gallery de Londres
Christof Metzger, comisario del Albertina Museum de Viena, el mayor museo especializado en Durero, asegura «no tener absolutamente ninguna duda» de que se trata de una pintura original del renacentista realizado a principios del siglo XVI. Sin embargo, su predecesor en el cargo, Fritz Koreny, cree que podría tratarse de una obra del discípulo de Durero, Hans Baldung Grien.
En la actualidad, el dibujo se encuentra a la venta en la galería Agnews Gallery de Londres. En el catálogo de la galería se especifica que está firmado por el autor con sus iniciales, AD, en la parte inferior central del cuadro, y lo datan en el año 1503 (Durero falleció en 1528). Según los expertos, el dibujo podría alcanzar hasta 50 millones de euros.
Las pruebas de su originalidad
Exámenes posteriores desvelaron que la firma está hecha con la misma tinta que el dibujo y que se corresponde con la forma en que Durero firmó otra veintena de obras entre 1501 y 1514. Además, se llevó a cabo en un papel con una marca de agua de tridente y anillo, el mismo motivo que se ve en más de 200 hojas utilizadas por el artista. Así el boceto, probablemente un trabajo preparatorio para una pintura de alrededor de 1506, es el primer dibujo «totalmente desconocido» del artista que resurge desde la década de 1970.
La Agnews Gallery ha investigado también el origen del dibujo, desde la Maison Carlhian de París en colaboración con los Duveen Brothers de Nueva York (1939), André Carlhian (después de 1939), de quien pasó por descendencia a Jean-Paul Carlhian, en Massachusetts, hasta su muerte en 2012, cuando sus hijas lo vendieron y lo adquirió el anónimo comprador por 26 euros.
Según la descripción de la obra, se trata de «una composición muy refinada y hasta ahora inédita, ejecutada en tinta sobre un fino lienzo». En él, «la Virgen está sentada en un banco de hierba y sonríe al espectador con la cabeza suavemente inclinada hacia la derecha. En una postura inusual, el niño está de pie en su regazo con una flor en la mano, apoyado en el brazo izquierdo de la Virgen; se gira para mirar a su madre, y presenta al espectador la parte posterior de su cuerpo desnudo. Su rostro está totalmente en la sombra, pero bellamente sugerido. El efecto es que el Niño presta toda su atención a su madre, mientras ella está ocupada en observar al espectador».
El catálogo, que da por hecho que es un original de Durero, continúa describiendo los trazos. «El asiento está construido con postes y tablones clavados en el suelo y está ciertamente relleno de tierra, que proporciona el sustrato para la hierba que da nombre al cuadro. La luz de arriba proporciona el contraste en la túnica y aporta espacio y volumen, iluminando la frente y la mejilla izquierda de la Virgen y su mejilla izquierda, de modo que los ojos, la nariz y la boca emergen de la parte derecha de su rostro, que está en sombra». Según la galería, el compromiso vital de Durero con el tema de la Virgen y el Niño fue solo superado por su estudio de la Pasión de Cristo. En total, produjo 14 grabados, cinco xilografías, veinte pinturas y más de 70 dibujos y estudio sobre el tema. La Virgen y el Niño con una flor sobre un banco de hierba pertenece a esta categoría.
Comentarios
