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27 de abril de 2024

Xavi Hernández, entrenador del Barça, en el partido ante el Alavés

Xavi Hernández, entrenador del Barça, en el partido ante el AlavésEFE

Xavi utiliza el caso Negreira para dejar caer que los árbitros arbitran en su contra de forma intencionada

Xavi Hernández sigue con sus quejas y su victimismo en rueda de prensa. Pendiente siempre de lo que dicen de él en la prensa –utiliza continuamente el argumento de «me matáis» ante cualquier cosa, pendiente de las críticas que le hacen– este sábado, tras la victoria ante el Alavés en Liga, elevó un poco más la línea de dónde se puede quejar y llegó a utilizar el caso Negreira para victimizarse.
Así, el entrenador catalán utiliza ahora ese escándalo como argumento para decir que al Barça le ha perjudicado. Es decir, la víctima de que el Barcelona estuviera pagando millones de euros al número 2 de los árbitros en España es... el propio Barcelona.
«Estamos pagando el caso Negreira», soltó Hernández para quejarse de las decisiones arbitrales que están en su contra. El contexto fue la expulsión que sufrió Vitor Roque en Vitoria. El brasileño vio dos tarjetas amarillas en pocos minutos y la segunda es muy dudosa, con los vídeos de la jugada mostrando que Roque no toca a Rafa Marín, defensa del Alavés. Eso sí, Marín después demostró en sus redes sociales que tenía una herida en la pierna, por lo que el futbolista del Barça sí le tocó.
Sea como sea, Xavi tiene todo el derecho a quejarse de los árbitros (aunque dice que ya no lo hará más) y a mostrar su cabreo por lo que considera que es una roja injusta. Lo hacen todos los protagonistas del fútbol, quejarse no es un delito, aunque desde el Comité Técnico de Árbitros cada vez amenacen más la libertad de expresión.
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Pero lo que hace ahora Xavi, que busca ahora salvar dialécticamente lo que no consigue con su trabajo como entrenador, es dar la vuelta a la realidad y decir (o más bien dar a entender) que el caso Negreira les perjudica porque por este caso los los árbitros van contra su Barça, se equivocan más contra ello.
Más allá de lo que pueda decir, Xavi se expone a una sanción por parte del Comité porque lo que viene a decir, sin decirlo de forma clara, es que los árbitros arbitran de forma intencionada en contra suya. Y el argumento es por el caso Negreira, que «estamos pagando» en contra.
Cabe recordar que el caso Negreira es el pago de millones y millones de euros del Barcelona al número 2 de los árbitros en España y eso Xavi ahora considera que lo están «pagando» en contra. Algo surrealista sino es porque Xavi lo piensa de verdad y se une a la acusación directa –por ahora sin sanción– de que la Liga está «adulterada» y no por el caso Negreira sino por los vídeos de Real Madrid TV, que «condicionan a los árbitros».
Xavi, que vive pendiente de las críticas, eleva así sus quejas y acusa a otros de adulteraciones y arbitrajes en su contra en una especie de justificación de su mala temporada, como un intento de ocultar lo que ha llevado a que tenga que dimitir en diferido, que no han sido los árbitros sino caer goleado ante Real Madrid, Athletic Club y Villarreal en dos semanas y perder con ello tres títulos en dos semanas.
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