Inauguración del primer Mcdonald's en la plaza Pushkin de Moscú
McDonald's, Disney...Las grandes multinacionales que han abandonado Rusia
Cientos de empresas han decidido abandonar Rusia debido a la mala reputación y a las dificultades logísticas y de aprovisionamiento causadas por la guerra con Ucrania
Ya es oficial. McDonald's abandona definitivamente Rusia. La compañía ha comunicado recientemente que pone a la venta sus 850 establecimientos y que después de tres décadas se retira del país debido a la invasión de ucrania por parte del Kremlin.
La decisión no ha sido fácil. Se prevé que tenga un coste de hasta 1.400 millones de dólares. «Algunos podrían argumentar que facilitar el acceso a los alimentos y seguir empleando a decenas de miles de ciudadanos de a pie es seguramente lo correcto. Pero es imposible ignorar la crisis humanitaria causada por la guerra en Ucrania. Y es imposible imaginar que nuestros arcos dorados representen la misma esperanza y promesa que nos llevó a entrar en el mercado ruso hace 32 años», aseguraba Chris Kempczinski, director general de McDonald's.
Pero McDonald's no ha sido la única multinacional que ha decidido dar de lado a Rusia tras el inicio de la guerra.
Las empresas que han abandonado Rusia
La huida de empresas extranjeras de Rusia se ha ido generalizando con el avance del ejército ruso por territorio ucraniano. Las sanciones que terceros países han impuesto al Kremlin, más allá que el conflicto bélico en sí, situado en la frontera, han incrementado las dificultades logísticas y de aprovisionamiento. Del mismo modo, las empresas que deciden quedarse comienzan a experimentar una crisis de reputación.
Ya han abandonado el país euroasiático compañías del mundo del automóvil, como Renault, Ford, BMW, Mercedes-Benz, Peugeot, Jaguar o Porshe. También lo han hecho compañías tecnológicas como Apple, Nokia, Siemens o Intel.
El pasado mes de marzo, la compañía textil Inditex, envió un comunicado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) en el que anunciaba la suspensión temporal de sus actividades en Rusia. De este modo, suspendieron la actividad en las 502 tiendas que se encuentran distribuidas por todo el país (86 de ellas de Zara) y la de su canal online.
Otra compañía de ropa muy conocida aquí en España, Tendam, que cuenta con las marcas Cortefiel, Pedro del Hierro, Springfield o Women'secret, entre otras, también anunció el cierre temporal de sus establecimientos.
«La decisión de suspender temporalmente la actividad en Rusia se efectuará garantizando la máxima protección a todos los empleados y colaboradores», aseguró la compañía
También el mundo de la cultura plantó cara a Putin y algunas multinacionales dedicadas al ocio y al entretenimiento se han negado a aceptar las condiciones del Kremlin para quedarse.
Es el caso de Netflix, que anunció a finales del mes de febrero que no cumpliría con la nueva ley audiovisual de Rusia, que obligaría a la plataforma a incluir una veintena de canales públicos para poder operar en el país.
Por su parte, Twitter ha anunciado que añadirá una advertencia en los mensajes que compartan enlaces y noticias de medios controlador por el Kremlin, de los que también tratará de reducir su circulación en la plataforma. «Nuestro producto debe facilitar la comprensión de quién está detrás del contenido que ve y cuáles son sus motivaciones e intenciones», añadió el jefe de integridad de esa plataforma, Yoel Roth.
Guerra Rusia-Ucrania
Facebook y Twitter dejan de estar accesibles en Rusia por el bloqueo del Kremlin
También Disney, Warner Bros y Sony han decidido pausar su actividad en Rusia. Disney, que fue la primera en pronunciarse, aseguró además que «tomará futuras decisiones comerciales» conforme evolucione la situación y aseguró que se uniría a la asistencia humanitaria a través de otras ONG colaboradoras.
El sector financiero también se ha visto afectado en Rusia, pero para que las sanciones sean efectivas es necesario un bloqueo en los medios de pago. Así, a las pocas semanas de la invasión, Visa y Mastercard anunciaron el bloqueo a las operaciones a los bancos rusos. Poco después hacía lo mismo American Express, dejando inutilizados métodos de pago como PayPal o Western Union.
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