Servirá de complemento con los ya existentes, como es el caso de la eficiencia energética
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Esta es la nueva etiqueta que llevarán los electrodomésticos en España
Según la secretaria general de Consumo, esta medida va a marcar «un antes y un después», favoreciendo los derechos sostenibles y ajustándose a los nuevos reglamentos
La entrada en vigor de la nueva Ley de Consumo Sostenible ha obligado a que todos los productos electrónicos y electrodomésticos incorporen una nueva etiqueta. De hecho, comunicará si se trata de un producto fácil de reparar o lo contrario, por lo que se podrá sancionar a aquellas empresas que ofrezcan una información fraudulenta.
La secretaria general de Consumo y Juego, Bibiana Medialdea, ha comunicado que indicará «cómo de fácil o difícil es conseguir las piezas del electrodoméstico o también cómo de cara o no puede ser la reparación en función al precio del producto». Por ello, a la hora de adquirir un nuevo producto se podrá consultar el índice de reparabilidad.
En este sentido, también hará que los ciudadanos comparen las facilidades que ofrecen algunos artículos frente a otros, ya que servirá de complemento con los ya existentes, como es el caso de la eficiencia energética. Por otro lado, la ley tendrá en cuenta el 'ecodiseño' de los productos, favoreciendo aquellos que dispongan de una mayor durabilidad y facilidad a la hora de repararlos frente al resto.
«Un antes y un después»
Respecto a este tema, tal y como argumenta la secretaria de Consumo, esta medida va a marcar «un antes y un después», favoreciendo los derechos sostenibles y ajustándose a los nuevos reglamentos que está introduciendo en el último año la Unión Europea. Asimismo, en respuesta a estas directrices y la nueva Ley de Consumo Sostenible, se obligará a este tipo de empresas a que ofrezcan este tipo de información bien fundamentada.
Todas las afirmaciones y alegaciones medioambientales que no se consideren lo suficientemente justificadas o sean genéricas serán prohibidas. Finalmente, según explica, más de la mitad de estas alegaciones —a nivel europeo y en España— se realizan con escasez de fundamentos, por lo que están elaborando una guía de buenas prácticas para que la información sea «veraz, sin confusión».
Un detalle que se debe recordar es que aquellas empresas que ofrezcan información engañosa podrán ser sancionadas con multas desde 100.000 euros. Al mismo tiempo, la responsable de Consumo ha destacado la importancia de una información veraz, «sin utilizarlo para hacer una competencia desleal».
