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La presidenta de la Junta de Extremadura, María Guardiola (c), durante la inauguración del acto organizado por la plataforma ciudadana 'Sí a Almaraz, Sí al futuro'

La presidenta de la Junta de Extremadura, María Guardiola (c), en el acto 'Sí a Almaraz, Sí al futuro'Efe

Extremadura exige la continuidad de la central nuclear de Almaraz: «Esta tierra no está para más castigos»

Los defensores de la instalación señalan que su cierre implicaría la pérdida de cerca de 4.000 puestos de trabajo

Ochenta entidades han unido su voz contra el cierre de la central nuclear de Almaraz. La plataforma ciudadana 'Sí a Almaraz, Sí al futuro' ha liderado un acto celebrado en Navalmoral de la Mata para la firma de la 'Alianza por Almaraz', un manifiesto conjunto que reclama la continuidad de la infraestructura más allá de 2027.

El presidente de la plataforma y alcalde de Belvís de Monroy y Casas de Belvís, Fernando Sánchez, ha calificado de «injusto que, mientras se destinan grandes subvenciones a otras industrias, se ahogue fiscalmente a la central».

María Guardiola, presidenta de la Junta de Extremadura, ha intervenido en la jordana para reivindicar la persistencia de la central nuclear «por encima de los colores y las siglas para apoyar una industria y, sobre todo, para exigir respeto a una forma de vida» .

La presidenta extremeña ha incidido en que Extremadura «no está para más castigos, merece justicia, respeto y un futuro en igualdad con el resto de España (...) Hemos convertido Almaraz en un símbolo. Es un símbolo de lucha conjunta y de amor por lo que somos. Un símbolo de todos, que representa lo que debemos preservar: empleo de calidad, formación, innovación, identidad".

El líder de la plataforma ha alertado de que el cierre conllevará «más dependencia energética, menos actividad económica y la despoblación, poco a poco, de los pueblos» y ha apelado a la ministra Sara Aagesen, responsable de Transición Ecológica y Reto Demográfico, «a que adopte la posición que le corresponde y siente a todos los concernidos para dar continuidad a la central».

Guardiola ha aludido a que el cierre de la planta de Almaraz supondría perder casi 4.000 empleos y desmantelar un sistema productivo del que dependen pueblos enteros. «Amenazaría la estabilidad y la independencia energética de Extremadura y de toda España», ha alertado.

El acto ha contado con la participación, a través de un vídeo, del presidente de la Diputación de Cáceres, Miguel Ángel Morales, alcaldes de distintos signos políticos, y representantes de la sociedad civil, quienes han coincidido en la necesidad de garantizar la continuidad de la central como motor de empleo y pieza clave en la soberanía energética de España.

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