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16 de mayo de 2024

La ministra de Educación, Pilar Alegría

La ministra de Educación, Pilar AlegríaBorja Puig de la Bellacasa

El Gobierno decide no modificar la EBAU de 2024 y mantenerla igual que los años anteriores

El Ministerio de Educación y Formación Profesional dirigido por Pilar Alegría, ha decidido aplazar un año la reforma de la prueba

Dos semanas antes del inicio de curso para los alumnos de segundo de Bachillerato, el Ministerio de Educación ha anunciado que la Evaluación del Bachillerato para el Acceso a la Universidad (EBAU) de este nuevo curso no sufrirá cambios, seguirá igual que los años anteriores. Esta decisión ha surgido durante la reunión del secretario de Estado de Educación, José Manuel Bar, con los representantes de las comunidades autónomas.
En este sentido, el Ministerio de Educación y Formación Profesional, dirigido por Pilar Alegría, ha decidido aplazar un año la reforma de la prueba. Por lo que quedan paralizadas las nuevas guías de corrección de los exámenes publicadas por el Ministerio, las cuales descontarían 0,25 puntos por cada error ortográfico y las tildes contarían como media falta.
El Gobierno había diseñado a través de un real decreto cómo tendría que ser este examen de 2024 para adaptarlo a la última reforma educativa (Lomloe, conocida como ley Celáa), ya que cambiaba varios aspectos, entre los que destacaban los currículos –el contenido de lo que se enseña en clase–, la forma de aprender del alumnado y la implementación de contenido menos memorístico y competencial.
Sin embargo, el pasado 31 de mayo Educación se paralizó la aprobación del borrador del real decreto que regulaba la nueva prueba universitaria, cuya aplicación iba a comenzar en junio de 2024 debido a la convocatoria del 23J. Entre las razones estaba que el Gobierno estaba en funciones, por lo que su aplicación, según explicó Alegría, debería llevarla a cabo Ejecutivo que saliese de las urnas.
Una de las novedades de esta nueva EBAU era la duración de los exámenes, los cuales pasaría de 90 minutos a 105, ya que iban a incluir ejercicios memos memorísticos en los que el estudiante debería reflexionar. Sin embargo, a pesard e los deseos de la ministra, no se iba a incluir en el acceso la prueba de madurez que pretendía agrupar en un único examen las asignaturas de Lengua Española, Lengua Cooficial, Lengua Extranjera, Historia e Historia de la Filosofía.
Si finalmente se implementa este nuevo modelo en 2025, los resultados de esta prueba supondrán un 40 % de la nota para el acceso a la universidad, mientras que la media de Bachillerato será el 60 % restante.
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