Captura del vídeo de la casa del hijo de Conde Pumpido, clave en la investigación
Este es uno de los vídeos clave de la casa del hijo de Conde-Pumpido: la denunciante aporrea la puerta
El atestado policial evidencia las numerosas contradicciones que hay en las versiones de la mujer que le acusó de agresión sexual
El Debate ha accedido al atestado policial completo del caso Cándido Conde-Pumpido hijo. Constan varios vídeos del interior de la casa durante la madrugada en la que la mujer brasileña asegura que le agredió sexualmente. Según la denunciante, Cándido la violó en torno a las cuatro de la madrugada del viernes 3 de noviembre. «Lo lógico es que si eso fuese verdad», dicen fuentes judiciales, «ella hubiera salido huyendo a la mínima posibilidad. Lo lógico es que su actitud fuese huraña y retraída con Cándido. Nada de eso se ve en las imágenes».
Tres horas después de la supesta agresión sexual se ve a la joven pasearse por la casa enfundada en una camiseta del Real Madrid (propiedad de Conde-Pumpido), con una copa de vino en la mano hablando tranquilamente. Lo dice la propia Policía en su análisis de las imágenes: se observa a la que parece ser la denunciante, vestida únicamente con una camiseta deportiva charlando con quien parece ser el detenido Candido Conde-Pumpido, que no sale en las imágenes. Ella da vueltas por la habitación en actitud relajada, entrando y saliendo de cuadro manteniendo una conversación distendida que no se puede transcribir al hablar ella en portugués. Se observa que se sirve una copa de vino».
Otro de los vídeos que se analiza en las diligencias corresponde a las diez de la mañana del viernes 3 de noviembre. En las imágenes se observa como Conde-Pumpido acompaña hasta la puerta exterior de su chalet a la joven brasileña. El abogado del investigado Ricardo Álvarez Ossorio aseguró estos días en televisión: «La acompañó a coger un Uber». El coche no aparece y Cándido la deja fuera, se mete en la casa y cierra la puerta. «Lo que sucede a partir de ahí no conjuga bien con el comportamiento de una mujer agredida sexualmente», apunta una fuente judicial. «Ella aporrea la puerta y grita que la dejen entrar, una y otra vez. ¿Qué mujer violentada quiere regresar a la casa de su atacante? No tiene sentido».
Lo cierto es que en el vídeo se oye como la mujer brasileña golpea con fuerza la puerta del domicilio del hijo del Presidente del Constitucional. La Policía lo describe así en el atestado: «Se observa al detenido Cándido Conde-Pumpido Varela, dando vueltas por la habitación, saliendo y entrando de cuadro, a veces mantiene una conversación telefónica. Se oyen gritos a los lejos de una mujer».
Y continúa el atestado:
«Cándido se encuentra al teléfono. Está hablando con alguien. –Sí, sí, dime, sí, dime, no no no, pues que plante, pues que se plante si quiere la Policía, pues menudo [se oyen gritos y ruidos del exterior que le distraen de la conversación y vuelve a salir. al volver ya no habla por teléfono] –Perdóname [Cándido está fuera de cuadro, parece que se dirige a la persona que grita desde el exterior]. –Ali, Ali, por favor, deja de dar golpes por favor [se oye un grito femenino: «Abre la puerta»]. Ali, estás descontrolada. Por favor Ali».
El vídeo continúa y la Policía sigue transcribiendo: «[Se oyen gritos pudiendo entender una voz de mujer: 'Abre la puerta'] –No, no voy a abrir la puerta [continúan los gritos de voz femenina y golpes del exterior]. Cándido parece que dirige a la persona que está fuera: '¡Mira me cago en!... Vale... Adiós'. [Se vuelve a oír la voz femenina: '¡Abre la puerta!']. Cándido entra en la habitación . Vuelve a usar el móvil: 'Oye por favor, déjame en paz, si quiere que llame a la Policía o que llame a quien sea. Que deje de darme gritos (...). Yo no quiero que haya ningún problema. [Se aproxima nuevamente a la habitación ]. Si quiere hablar yo hablo con ella. Me la pasas y hablo, yo no puedo estar con una tía que es que me ha estado dando todas las (no se comprende)».
El audio y el vídeo continúa:
«Mira, vale pues no te preocupes que yo voy a irme ¿Vale? Sí, sí, bueno da igual, escúchame ¡Que yo no he dejado! ¡Que es ella la que ha querido irse! Que cuando ha querido irse ha querido que yo la acompañara [se marcha de la habitación y deja de entender lo que dice] (...) Que solo estoy intentando... no, no, que, sí, sí, da igual. Que lo único que quiero es poder dormir, poder descansar y poder estar tranquilo y poder llamar a alguien para que me haga la limpieza de la casa y solo quiero eso».
La jueza de instrucción analizó hasta 101 vídeos de la noche de la supuesta agresión sexual y concluyó que lo que describía la denunciante no casaba bien con lo que se veía y escuchaba en las imágenes. Por eso dejó en libertad provisional al hijo del Presidente del Tribunal Constitucional. En el entorno de Cándido Conde-Pumpido están esperando al sobreseimiento del caso para ir contra la mujer brasileña por denuncia falsa. Quieren limpiar la imagen del abogado y que la condenen para que no haya duda de quién dice la verdad.
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