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30 de abril de 2024

Pedro Sánchez junto a Mohamed VI, que esta vez sí estaba en Rabat y le recibió

Pedro Sánchez junto a Mohamed VI, que esta vez sí estaba en Rabat y le recibióEFE

Rabat incumple su parte

Marruecos vuelve a poner excusas a Sánchez para no abrir las aduanas comerciales de Ceuta y Melilla

El presidente del Gobierno consigue la foto que quería con Mohamed VI, pero no una fecha para un proyecto vital para la economía de ambas ciudades autónomas. «Por parte española todo está listo»

Pedro Sánchez recibió otra vez largas por parte del primer ministro marroquí al respecto de la reapertura de la aduana comercial de Melilla, que lleva casi seis años cerrada por decisión del reino alauita, y la apertura de una nueva en Ceuta. Dos infraestructuras vitales para el comercio de la zona que acumulan años de retraso, para desesperación de los empresarios, porque el país vecino no termina de cumplir su compromiso con España.
El presidente del Gobierno compareció desde Rabat después de una visita en la que pudo mantener encuentros con Aziz Ajanuch y también con Mohamed VI. Esta vez sí, porque hace un año el rey marroquí le dio plantón con motivo de la Reunión de Alto Nivel entre ambos ejecutivos.
Durante su rueda de prensa, Sánchez situó la «normalización aduanera» como uno de los aspectos fundamentales de la relación bilateral con Marruecos. «Por parte española todo está listo. Marruecos dice que tan pronto se completen los preparativos podremos empezar», continuó.
No obstante, el presidente reconoció que no puede dar una fecha porque Marruecos no se la ha dado a él. «Por la parte española todas las tareas están hechas. Hemos quedado en que pronto va a haber una reunión entre ambos gobiernos para clarificar la normativa de aduanas y espero que pronto podamos ya tener avances significativos en esta cuestión».
Las excusas que recibió Sánchez de Ajanuch fueron parecidas a las que el ministro José Manuel Albares recibió de su homólogo marroquí a finales de diciembre, cuando viajó a Rabat para intentar agilizar el asunto. Entonces, Albares y Nasser Bourita comparecieron conjuntamente y este último afirmó: «No es un problema de compromisos o político, es un problema de implementación técnica».
El ministro Albares y su homólogo marroquí, Nasser Bourita

El ministro Albares y su homólogo marroquí, Nasser Bourita, en diciembreEFE

Se suponía que esas dos aduanas comerciales eran una de las principales contrapartidas que Sánchez había sacado a Mohamed VI a cambio de su postura respecto al Sáhara Occidental, junto con el control de la inmigración ilegal. Y se suponía también que la Reunión de Alto Nivel de febrero de 2023 debía haber servido para concretar un calendario. Sin embargo, aquella cita acabó sin fechas concretas y un año después sigue sin haberlas.
Por lo demás, el líder del Ejecutivo español alabó durante su comparecencia la cooperación de Marruecos en lo referido a inmigración ilegal y lucha contra el narcotráfico. «El resultado de las políticas es excelente. La cooperación es extraordinariamente positiva, no tenemos ningún reproche que hacer, ni tampoco en la lucha contra el narcotráfico», sostuvo Sánchez.
Como contó El Debate este miércoles, el Ministerio de Interior maneja cifras según las cuales el 43 % de las embarcaciones que llegaron a las costas españolas en 2023 había salido de Marruecos. Además, el vecino del Sur no está siendo demasiado vigilante con las narcolanchas, y los vuelos patera de la compañía Royal Air Maroc -muy vinculada con Mohamed VI- se han convertido en un quebradero de cabeza más para los agentes españoles.
Por último, Sánchez se reafirmó en su cambio de postura respecto al Sáhara Occidental, del que pronto se cumplirán dos años. Sostuvo que Marruecos puede estar tranquilo, porque cumplirá los compromisos de la declaración conjunta firmada en abril de 2022.
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