María Asunción Mateo y Alberti en la imagen de portada de sus memorias
Cádiz
La viuda de Alberti, en contra de renombrar el puente Carranza: «Lo usan para dividir a los gaditanos»
María Asunción Mateo cree en una entrevista en 'Diario de Cádiz' que no es «honesto» ni «conciliador» el cambio al nombre del poeta
El cambio de denominación del puente Carranza de Cádiz está al caer. Después de más de medio siglo desde su inauguración y su bautizo con el nombre del alcalde de la ciudad que promovió su construcción, hay «consenso total» en el Gobierno de España para cambiar la nomenclatura en virtud de la Ley de Memoria Democrática y renombrarlo como Rafael Alberti.
Sumar, que ha llevado la propuesta al Congreso de los Diputados, asegura que el Ministerio de Transportes, presidido por Óscar Puente, se alinea con sus pretensiones, y abandera que la medida cumple con las expectativas de los gaditanos. Sin embargo, la principal crítica ha venido de la parte del homenajeado, el poeta de El Puerto de Santa María.
Su viuda, María Asunción Mateo, se ha mostrado escéptica con la medida. En una entrevista con Diario de Cádiz, considera que «no es honesto» utilizar el nombre del poeta «como arma arrojadiza para dividir a los gaditanos». «No me parece honesto utilizar el apellido de Alberti, un comunista comprometido hasta el lúcido final de sus días, como arma arrojadiza para dividir a los gaditanos. No fue esa la actitud del Alberti conciliador que conocí. ¡Hay tantas cosas hermosas en Cádiz, con más connotaciones poéticas que un puente, ya con nombre, para llamarlas Rafael Alberti!», señala Mateo en la entrevista.
«Con la mano abierta»
La mujer que compartió la vida del poeta durante veinte años, a su vuelta a España tras el exilio, recuerda que «regresó para ayudar a consensuar una democracia en la que tuvieran cabida todos los españoles. Hay que recordar una de sus frases más conocidas: 'Me fui con el puño cerrado y vuelvo con la mano abierta en señal de concordia entre todos los españoles'. Él cumplió sus palabras, pero parece que muchos políticos se han olvidado de ellas».
En este sentido, Mateo opina que «cualquier recuerdo que lo integre en la provincia que amó tanto y que sirva para no dividir a su gente sino a unirla, lo haría feliz», pero el cambio de denominación del Carranza no cumple con ese ideal. La viuda de Alberti cree que «la mayoría de los gaditanos» relaciona este puente «desde siempre con el alcalde que promovió, en una época difícil, una obra tan singular, colosal y beneficiosa para el crecimiento de la ciudad y toda la Bahía de Cádiz».
Un «error» político
Por ello, Mateo asegura entender «muy bien» a la familia Carranza en su temor a que cambien el nombre: «Ese puente se construyó con el tesón del entonces alcalde, incluso llegando a tener alguna desavenencia con el Gobierno franquista para poder llevarlo a cabo por falta de liquidez económica. Que quieran conservar ese recuerdo suyo me parece totalmente lícito. En este momento histórico, plantearse la filiación política del alcalde que lo impulsó me parece un error».