La maqueta de Cádiz se finalizó en 1.779
Cádiz
Cádiz restaura su joya más rara: la maqueta que encargó Carlos III y se ensambló en secreto en palacio
El Ayuntamiento inicia los trabajos de conservación y anuncia una nueva maqueta de la ciudad actual
El rico patrimonio de Cádiz va más allá de monumentos de toda época o piezas de arte de las modalidades más conocidas como pintura y escultura. Uno de sus activos más singulares es la maqueta de la ciudad realizada en el siglo XVIII a instancias del rey Carlos III. No existe nada igual en España por la sencilla razón de que, tras la de Cádiz, el monarca decidió abortar el plan de recrear a escala todas las plazas fuertes del país.
La impresionante maqueta –de 25 metros cuadrados, formada por 350 piezas desmontables a una escala 1:250– lleva más de un siglo emplazada en el Museo de las Cortes, donde se ha convertido en uno de sus grandes reclamos. Allí han arrancado ahora los trabajos de conservación y restauración, que se extenderán hasta el 25 de noviembre.
La propia limpieza de los bloques se convertirá en espectáculo en vivo, ya que los visitantes podrán asistir a los trabajos del restaurador-conservador Pedro Macías. Su labor incluye, entre otras, el desmontaje de todos los módulos y su limpieza integral para la retirada de la eliminación del polvo ambiental; el estudio individualizado de cada módulo y la consolidación de piezas desprendidas; la limpieza de la superficie plateada del mar, así como el tratamiento superficial de protección de las maderas.
Desde el Baluarte de la Candelaria
Hablamos de una maqueta sorprendente y artísticamente valiosa que, además, cuenta con una historia fascinante. Nace del encargado de Carlos III, que quería una maqueta por cada plaza fuerte del país, al igual que tenían los reyes de Francia en Versalles. Fue realizada por el teniente coronel de Infantería e ingeniero Alfonso Ximénez entre julio de 1777 y marzo de 1779. El Rey quedó encantado, pero al ver el elevado coste desistió de seguir con otras ciudades.
Las piezas, de ébano, caoba y marfil, se crearon en el Baluarte de la Candelaria de Cádiz y se trasladaron a Madrid. El conjunto se montó en secreto en el Salón de los Reinos, en el Palacio del Buen Retiro. En la capital permaneció hasta su regreso a Cádiz en el siglo XIX. Desde entonces ha sido restaurada varias veces y aún sigue deparando sorpresas: el año pasado se halló una perfecta reproducción del interior de la capilla de Santa Catalina, en La Caleta, que había permanecido oculta tras un techo encolado.
Una maqueta 'next generation'
Pero además de poner a punto esta joya de hace 250 años, el Ayuntamiento ha confirmado que quiere una réplica del estado actual de la ciudad. Así, el Consistorio ha sacado a concurso el proyecto para la maqueta, que será de dos metros de ancho y metro y medio de largo. Costará tres millones con cargo a los fondos Next Generation y se realizará en bronce.
La futura pieza, cuyo emplazamiento aún está por definir, recogerá al menos cuarenta lugares de interés de la capital gaditana y contará con varios códigos QR para que los visitantes puedan acceder a más información sobre los monumentos o edificios reflejados. Con dimensiones y calidades más modestas, aspira a ofrecer un nuevo punto de vista que dialogue con la querida y famosa maqueta del siglo XVIII.