Suspendida 'in extremis' la condecoración a un policía local de Benalmádena que habría abusado de tres sobrinas

Un policía local de Benalmádena había sido distinguido con el distintivo amarillo al cumplirse los 30 años de servicio, un reconocimiento que se concede cuando se cumple dicha efeméride.

Además, el citado funcionario, de 60 años de edad, también iba a recibir durante la celebración del patrón dos felicitaciones públicas, una de ellas por su actuación en un incendio que asoló su localidad el pasado septiembre y otra por haber seguido en activo durante la pandemia de la covid.

Sin embargo, la condecoración ha debido de ser suspendida ‘in extremis’ pese a que el agente había manifestado su intención de acudir al acto, solicitando que dicha medalla se la impusiera su mujer. Está procesado por supuestos abusos sexuales a tres sobrinas que denunciaron «tocamientos» en el contexto de unos «juegos» supuestamente propuestos por el policía.

Según recoge SUR, el asunto había llegado a oídos de su familia, tanto biológica como política, que permanecen divididas tras las denuncias de las sobrinas, que pertenecen a ambas. Además, un pariente cercano también es policía local en este municipio, y pensaba acudir al acto del patrón acompañado de los suyos.

Condecoración suspendida

La Asociación Adolescencia Libre de Agresión Sexual (ALAS), había presentado una denuncia en la Jefatura exigiendo, además, respeto a las víctimas. Pretendían con ella exigir a la administración que evitara «cualquier actuación que pudiera interpretarse como un aval social o institucional a conductas que se encuentren bajo investigación». Por ello, ALAS solicitó a la Policía Local que «reconsiderara» la concesión de este reconocimiento, aludiendo al principio de «protección de las víctimas» y apelando a la «responsabilidad institucional».

El agente investigado tiene órdenes de alejamiento de 500 metros respecto a las menores que, ante la posibilidad de que acudieran al acto, ello llevara a un quebrando de la medida. Por ello, la Jefatura de la Policía Local tomó la decisión de suspender este año la imposición de las medallas.

El Ayuntamiento, por su parte, celebró la medida «ante un tema delicado y complejo» que lleva años «bajo investigación judicial». Para el Consistorio malagueño, se ha producido «una colisión entre la protección de los menores y el derecho constitucional a la presunción de inocencia», por lo que la suspensión será definitiva hasta que haya una sentencia firme. El caso está ahora en manos de la Fiscalía, mientras que el agente investigado sigue manteniendo su inocencia y alude a un conflicto familiar de carácter económico para justificar que se le esté haciendo la vida imposible.