Casa Real  El Rey: «Qué importancia tiene, en estos momentos confusos, no perder la brújula del espíritu democrático»

El Rey ha llamado este martes a «no perder la brújula del espíritu democrático» en estos momentos confusos, ha insistido en la defensa del «derecho frente a la fuerza y la arbitrariedad» y ha advertido que con la defensa de Europa «lo que está en juego no es lo que tenemos, sino lo que somos: ¡Eso nos jugamos!».

Don Felipe ha hecho estas manifestaciones en la Universidad de Coímbra, donde ha sido investido doctor honoris causa en Derecho junto al presidente de Italia, Sergio Mattarella, y en presencia del presidente de Portugal, Marcelo Rebelo de Sousa, «a quienes tanto admiro, con quienes tanto he compartido a lo largo de estos años», ha dicho el Rey, quien ha añadido que se siente «inmensamente afortunado» por su amistad.

Las tres advertencias del Rey

En su intervención, Don Felipe ha hecho tres advertencias: una sobre la libertad y la democracia, otra sobre el imperio de la ley y la tercera sobre la necesidad de defender Europa.

El Rey ha recordado las ideas que cruzaron el océano Atlántico y arraigaron en ambas orillas, y ha destacado la libertad y la igualdad: «Dos ideas revolucionarias que germinaron en la constitución de los EE.UU. y en otras democracias americanas, así como en las democracias europeas y en nuestro proyecto de integración». Y ha sido entonces cuando ha exclamado: «Qué importancia tiene, en estos momentos confusos, no perder la brújula del espíritu democrático. Y qué importancia tiene recordarlo precisamente aquí, en esta gran universidad europea, que nada sería sin ese valor necesario para ejercer la investigación y el magisterio: la libertad».

El imperio de la ley

En otro momento, el Rey ha afirmado: «Somos herederos del derecho romano y creemos en el imperio de la ley», y ha lanzado otra advertencia: «En un tiempo como este, de erosión del orden mundial basado en normas, qué importante es defender el derecho frente a la fuerza, el derecho frente a la arbitrariedad, el derecho como cimiento del orden internacional».

La tercera advertencia del Jefe del Estado ha sido sobre la defensa de Europa. Tras recordar que «Europa es hija del Derecho romano, del pensamiento filosófico griego, de la tradición judeo-cristiana y la Ilustración, así como del espíritu de reconciliación y superación de los europeos tras las devastadoras contiendas mundiales de la primera mitad del siglo XX», el Rey ha alertado: «Lo que está en juego no es lo que tenemos, sino lo que somos: ¡Eso nos jugamos!». Y ha añadido: «Qué importante es mirar hacia delante con confianza y convicción. Pero no lo es menos, hacerlo conociendo y entendiendo nuestro pasado; aprendiendo de lo que ha sido el siglo XX para Europa».

El Monarca ha llamado a asumir la defensa de Europa «en un ejercicio de responsabilidad y de memoria; no contra nadie, no contra ningún régimen o modelo, sino para defender el nuestro». También ha recordado que «la Unión es una casa construida a partir del consenso y de la solidaridad», que sus pilares «no están hechos para excluir o separar, sino que se basan en la libertad y en la igualdad de sus ciudadanos. Pero no les son ajenos los riesgos y males de nuestro tiempo, sean de origen externo o surjan de nuestra propia entraña europea».

Tras la ceremonia, los tres jefes de Estado se han trasladado a pie al Museo Nacional Machado de Castro, donde han sido recibidos por la tuna femenina de la Facultad de Medicina, y han asistido a la cena previa a la reunión de Cotec Europa que mantendrán este miércoles en el Convento de San Francisco de Coímbra