
Varias personas se abastecen de agua en una fuente pública de Valladolid
Apagón Castilla y León comienza a recuperar la normalidad tras cinco horas sin luz, internet ni agua
El apagón acaba pasadas las cinco y media de la tarde y deja una jornada con imágenes atípicas, como las de las colas en las fuentes
Pasadas las 12: 30 se producía en Valladolid el apagón generalizado que ha afectado a toda la Península Ibérica y que no ha terminado hasta aproximadamente las 17:30 y de forma intermitente. Cinco horas en las que el suceso, cuyo origen está en estos momentos aun por determinar, ha dado al traste con una normalidad que ya se comienza a recuperar en la región. Por el camino, ha dejado a la capital de facto sin semáforos, internet ni agua, lo que ha provocado imágenes como las de las colas en las fuentes de agua.
Aproximadamente una hora después, se reunía el presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, en la Agencia de Seguridad y Emergencias 112 «para coordinar y garantizar el funcionamiento de servicios básicos como atención sanitaria, emergencias, residencias de mayores y centros educativos».

La calle López Gómez de Valladolid, este lunes, durante el apagón
«Hemos declarado el nivel 2 del Plancal (Plan Territorial de protección civil ) de Castilla y León y quiero trasladar un mensaje de tranquilidad. Seguiremos trabajando hasta el restablecimiento de la normalidad», ha señalado en un tuit el dirigente castellanoleonés pasadas las cuatro de la tarde, en una de las pocas comunicaciones que han podido ver con dificultades algunos ciudadanos.
El 112 Castilla y León ha informado sobre las cinco de la tarde de que su servicio estaba «operativo y se ha reforzado duplicando el número de gestores para poder atender las llamadas de emergencia. Es muy importante que lo utilices solo en caso de emergencia para evitar colapsar las líneas». Y es que está por determinar el número de personas que se han podido ver afectadas en situaciones como permanecer en un tren parado o quedar atrapado en el ascensor. Según CyLTV, solo en Valladolid los bomberos han tenido que rescatar a unas 200 personas encerradas en elevadores.
«¡Vamos a morir todos»!
Filomena, la pandemia de coronavirus, la dana... y ahora otro evento de tufo distópico que ha levantado todo tipo de suspicacias en las calles pucelanas, donde se han repetido con frecuencia palabras como «Putin» o «Rusia». En las radios de los coches y los transistores, algunos ciudadanos escuchaban noticias, después desmentidas, sobre «ciberataques». Y mientras tanto, un trasiego de gente por las soleadas calles, mucha cargada con bolsas con alimentos y botellas de agua. Otros recargaban garrafas e incluso bidones en fuentes como la de la plaza de la Cruz Verde. En la cercana calle Mantería, poco después, un grupo de jóvenes gritaba en broma desde una ventana: «¡Vamos a morir todos!».
Con los supermercados cerrados, las tiendas asiáticas de alimentación han hecho el agosto durante este 28 de abril que ya tiene su pequeño hueco en las páginas de la Historia. Los bares que han permanecido abiertos, sobre todo los que tenían terraza, se han atestado e incluso en varios de ellos los camareros y clientes se han apañado a oscuras. Los portales de los edificios, en muchos casos, permanecían abiertos y se han visto estampas que evocaban a otra época, como la de personas llamando a las ventanas de los bajos.

Un establecimiento de Valladolid cerrado, este lunes, por el apagón
Una situación de caos e incertidumbre que los vallisoletanos han llevado con relativa tranquilidad, más allá de repetir escenas ya vistas en episodios como la pandemia. Agentes de la Policía Nacional y de la Policía Municipal circulaban en motocicletas y coches patrulla y alguno criticaba en corrillo la actitud de algunos vecinos. Los avisos de no coger el coche salvo en caso de extrema necesidad parecen haber calado y se ha registrado muy poco tráfico por las calles de la ciudad.
Esta relativa calma no ha evitado que en los alrededores del Hospital Clínico siguiera habiendo movimiento y cierto trasiego de ambulancias o que tuvieran que desalojar el centro de mayores de la plaza de San Juan. Asimismo, algunas farmacias, como la de la plaza de España, permanecían cerradas, como la mayoría de negocios de Valladolid. A Isabel, por ejemplo, el apagón le pilló en la cola de un bazar chino: «Me tuve que ir sin comprar; menos mal que ya había ido al supermercado». A su marido, Ángel, explica, el corte del suministro eléctrico le cogió mientras cuidaba unas gallinas, en la localidad de Villaralbo, en Zamora. «No hace caso al móvil y se ha enterado dos horas más tarde», relata.
Dos trenes parados en Zamora
En esa provincia, Europa Press ha informado que ya se estaba empezando a recuperar el suministro sobre las seis de la tarde. La Policía Municipal y los Bomberos han actuado para regular el tráfico durante las horas en las que no han funcionado los semáforos y para llevar a cabo atenciones como el rescate de personas atrapadas en ascensores o de acceso a las casas para personas con movilidad reducida, de acuerdo con la citada agencia, que indica que dos trenes se han quedado parados en la provincia. Uno, a la altura de Valdefinjas, cerca de Toro, y otro en la estación de Zamora capital. Éste cubría el trayecto Vigo-Madrid.
Según ha informado en la red social X el ministro de Transportes, Óscar Puente, en Castilla y León hay, asimismo, un tren parado en Venta de Baños (Palencia). Adif ha indicado, asimismo, que entre las estaciones de tren que permanecerán abiertas la noche del lunes se encuentra la de Valladolid-Campo Grande.
En Burgos ha comenzado a volver la luz en torno a las cinco de la tarde, progresivamente, y comenzando por barrios como Gamonal. Los bomberos de Burgos tuvieron que realizar varias salidas para liberar a personas que habían quedado atrapadas en ascensores, en todos los puntos de la ciudad, informa Europa Press, que recoge unas declaraciones de la alcaldesa de la ciudad, Cristina Ayala, que recogen el sentir de muchos castellanoleoneses: «Al principio pensábamos que era una cosa local, pero hemos visto que no, que tiene entidad internacional».