
La Cabezadas de León, en una imagen de archivo
Historia
Un cirio de arroba y dos hachas de cera: así son Las Cabezadas de León, una tradición de ocho siglos
Desde 1158 la corporación municipal y el Cabildo de San Isidoro debaten sobre si la entrega de esos objetos es foro u oferta como agradecimiento a un milagro
León ha celebrado este domingo la ceremonia de Las Cabezadas, una tradición que se remonta a 1158, cuando los restos de san Isidoro se sacaron en rogativa para pedir lluvia para los campos, y que sigue viva después de ocho siglos.
Desde 1158 la corporación municipal de la capital leonesa y el Cabildo de San Isidoro debaten sobre si la entrega de un cirio de arroba bien cumplida y de dos hachas de cera es foro u oferta como agradecimiento al milagro efectuado aquel año por san Isidoro, que provocó abundantes lluvias que acabaron con una pertinaz sequía que asolaba los campos leoneses.
Una gran sequía asolaba el campo leonés allá por 1158. Fue entonces cuando en rogativa sacaron los restos de san Isidoro a las calles por si ese fuera un buen remedio para colmar de agua los cultivos. Obró el milagro. Y en agradecimiento la ciudad entregó al Cabildo de San Isidoro un cirio de arroba y dos hachas de cera.

León celebra Las Cabezadas frente a la Real Colegiata de San Isidoro
Para los representantes municipales es una ofrenda, para el Cabildo Isidoriano, es una obligación del pueblo. Sobre ello debaten los representantes de unos y otros. Y así cada último domingo de abril en el que, más de ocho siglos después, León cumple con la tradición de Las Cabezadas, nombre que recibe el ceremonial por las exagerada inclinación, según precisa el Ayuntamiento de la capital leonesa.
En el claustro, el Cabildo acepta el presente, pero deja patente su carácter obligatorio o de foro. Por esta discrepancia sobre el carácter de la ofrenda, los representantes de ambas instituciones entablan una batalla dialéctica y hacen alarde público de sus cualidades oratorias. Al final, hay empate, y la discusión queda aplazada para el siguiente año.
En esta ocasión el concejal de Hacienda, Carmelo Alonso, actuó como síndico municipal, mientras que el Cabildo de San Isidoro estuvo representado por el canónigo Juan Jesús Fernández Corral, según informa Europa Press.

A la derecha, el alcalde de León celebra Las Cabezadas, en una imagen de archivo
Los actos institucionales comenzaron a las 11:45 horas con la salida de la corporación municipal encabezada por su alcalde, José Antonio Diez, hacia la Real Colegiata de San Isidoro. La comitiva llegó sobre las 12:00 horas a las puertas de la Basílica, donde fue recibida por el Cabildo.
Una vez en el claustro se celebró la ceremonia del foro u oferta y, una vez este acto concluyó, en tablas, tuvo lugar una misa tras la cual el Cabildo y representantes municipales se despidieron con «exageradas reverencias», como marca esta tradición que ya cumple ocho siglos.