
Una de las figuras bíblicas presentes en los murales de Sijena
Los murales de Sijena
Filtran un informe de la Generalitat que pide retener los murales de Sijena en Cataluña
Illa aseguró que «no obstruiría» el traslado, pero entre bambalinas las cosas no están tan claras
El pulso judicial y política entre los gobiernos de Cataluña y Aragón por las pinturas murales del Real Monasterio de Santa María de Sijena vuelve a estar en primer plano tras la sentencia del Tribunal Supremo que obliga a la Generalitat presidida por Salvador Illa a retornar las obras de arte a Huesca. Illa aseguró que «no obstruiría» el traslado, pero entre bambalinas las cosas no están tan claras.
Así, este viernes se ha filtrado un dictamen técnico del gobierno catalán elaborado en 2016 pero inédito hasta ahora que defiende que las pinturas murales deben quedarse en Cataluña. Según adelanta Crónica Global, sería el documento que la Generalitat plantea utilizar como base para argumentar en contra del traslado esgrimiendo argumentos técnicos, como que el traslado pondría en riesgo la conservación de las pintura.
El informe recuerda también que estas piezas –expuestas actualmente en el Museo Nacional de Arte de Cataluña (MNAC)– están catalogadas como patrimonio cultural catalán, después de que fueran arrancadas de su lugar de origen durante la Guerra Civil por la Generalitat republicana. El texto advierte que, incluso aunque haya la voluntad de acatar las sentencias, algunas pueden entrar en conflicto con derechos fundamentales y limitaciones legales.
El MNAC, en contra
El dictamen concluye que cualquier traslado debe ajustarse a los procedimientos administrativos previstos en la normativa de patrimonio cultural y museos. Desde el MNAC ya han hecho sonar las alarmas: este jueves, la jefa del Área de Restauración y Conservación Preventiva, Carme Ramells, advertía de que los estudios realizados a nivel físico constatan que estas pinturas y las reintegraciones «no soportan la vibración».En una atención a los medios, Ramells señalaba que «un traslado, un cambio de emplazamiento, podría suponer dañar las pinturas y es un riesgo elevadísimo». También ha querido dejar claro que no se está frente a unas pinturas murales, sino ante un «artefacto después de una serie de intervenciones» en la operación para salvarlas tras el incendio que sufrieron, con una parte muy fina de pintura original, extraída mediante la técnica del 'strappo'. Entre un 35% y un 38% son reintegraciones, ha dicho.
La semana que viene, el Patronato del MNAC prevé reunirse para abordar la cuestión. En él están presentes representantes del Gobierno de España, de la Generalitat de Catalñua y sel Ayuntamiento de Barcelona. La convocatoria, impulsada por el director del museo, Pepe Serra, tiene como objetivo abordar el cumplimiento del fallo del Supremo y analizar sus implicaciones.