Escuela de la localidad catalana de Canet de Mar, las familias que quieren castellano sufrieron una campaña de acoso
Tribunales
A prisión uno de los tuiteros juzgados por acosar a la familia de Canet que logró el 25 % de español
La Audiencia de Barcelona ha condenado a dos años de prisión a uno de los tres juzgados, junto a una multa de 1.980 euros e indemnización de 7.500 euros
La sección 21 de la Audiencia de Barcelona ha condenado a dos años de prisión a uno de los tres hombres juzgados por acosar a través de redes sociales a la familia de Canet de Mar (Barcelona) que logró el 25 % de escolarización en español en la escuela Turó del Drac.
La sentencia, fechada este jueves, también prevé que el condenado pague una multa de 1.980 euros y una indemnización de otros 7.500 por sus publicaciones en X, que el tribunal considera que constituyen un delito de odio y otro contra la integridad moral por el acoso a los padres de una niña que, entonces –en 2021–, tenía sólo cinco años.
La sentencia no es firme –aún se puede recurrir–, y también inhabilita al tuitero para ejercer en el ámbito docente, deportivo, de cultura o de tiempo libre durante más de tres años tras la pena de prisión. Los otros dos juzgados han quedado absueltos, ya que el tribunal considera que sus tuits sí quedan amparados en el marco de la libertad de expresión.
En su resolución, la sala afirma que los tuits contenían un «discurso con un potencial efecto erosivo de los pilares de la tolerancia», ya que sus mensajes invitaban a la acción y a la violencia, y pedían la expulsión de la familia tanto del pueblo como de Cataluña simplemente por una cuestión de uso de la lengua.
«Profundo temor»
«Entre los mensajes difundidos figuraban expresiones que contenían anuncios de causar un daño o perjuicio a la familia como represalia por la actuación de los denunciantes, o que instaban a aislarles a ellos o a su hija, mensajes que, de manera evidente, tenían aptitud para generar en los destinatarios una profunda inquietud y temor», subraya la jueza.
La magistrada se apoya en resoluciones del Tribunal Supremo, del Tribunal Constitucional y del Tribunal Europeo de Derechos Humanos, y señala que este último órgano ha reiterado que la libertad de expresión conlleva el deber de «evitar discursos que inciten al odio o que menoscaben los derechos de los demás». Por eso considera que los tuits del condenado no encajan en el ámbito de la libertad de expresión.
El juicio se celebró los pasados 16 y 17 octubre con la declaración de todas las partes, y después de resolver las cuestiones previas, se practicaron las pruebas que se declararon pertinentes: testificales, periciales de Mossos d'Esquadra y del médico forense, documental y el interrogatorio de los acusados.