Las máquinas de TMB
Cataluña
Cataluña abre la puerta a encarecer el precio del transporte público en 2026
Y los Comunes, socios preferentes de Salvador Illa, avisan que, en ese caso, no podrán negociar los presupuestos
Solo se garantizan las bonificaciones de la T-Jove. La T-Usual podría costar el doble
En 2022 se anunciaron los primeros descuentos en el transporte público que se mantienen hasta el 31 de diciembre, pero este panorama puede cambiar en 2026. La consejera de Territorio, Sílvia Paneque, ha admitido que el Govern no puede garantizar que el próximo año se mantengan estas bonificaciones.
Asegura que aún es «prematuro» avanzar las tarifas del próximo ejercicio porque la decisión dependerá, en buena parte, de las conversaciones con el Ministerio de Transportes, dirigido por Óscar Puente, de quien la Generalitat espera concretar compromisos de financiación compartida.
Aun así, la consejera ha avanzado la orientación que defenderá el ejecutivo catalán en la actualización tarifaria: un incremento equivalente al IPC. El Govern sostiene que, más allá de las rebajas temporales, son necesarios más recursos para invertir y mejorar el sistema de transporte. Eso sí, Paneque ha dejado claro que el único descuento que hoy por hoy tiene continuidad asegurada es el de la T-Jove, después de que el Ministerio garantizara su aportación económica específica. El resto de decisiones quedan pendientes de una «decisión compartida» con el Estado.
La posibilidad de eliminar o recortar bonificaciones ha encendido las alarmas en los Comunes, que consideran este punto una línea roja para cualquier negociación presupuestaria. El grupo sostiene que mantener las rebajas es fundamental para garantizar la movilidad de jóvenes, estudiantes y personas con menos recursos, especialmente en un contexto de encarecimiento del coste de la vida. Según el partido, una subida del transporte en 2026 haría inviable su apoyo a las cuentas del Govern.
Precios y bonificaciones vigentes
Este año, las tarifas de la ATM mantienen importantes rebajas para los usuarios habituales gracias a la aportación combinada del Estado y la Generalitat. Actualmente, la T-Usual de una zona cuesta 22 euros, tras aplicar el 50 % de descuento. La T-Jove, con validez trimestral para menores de 30 años, tiene un coste de 44 euros. El billete sencillo o la T-Casual no tienen reducciones.
Pues bien, si finalmente no se contemplan modificaciones para 2026, las tarifas volverían a los valores previos a la rebaja extraordinaria y eso supondría que la T-Usual costaría el doble o incluso un poco más del precio actual, unos 44 euros. El resto de títulos no bonificados registrarían aumentos equivalentes al IPC. La confirmación definitiva de estos cambios dependerá de la negociación con el Estado y del diseño tarifario que presente la ATM.
Capítulo aparte merece Rodalies, que ya dejó de ser gratis en julio. Desde entonces, entró en vigor las tarifas de 20 euros mensuales y de 10 para los menores de 26 años.
La discusión sobre las tarifas del transporte se ha convertido en uno de los principales, o uno más, de los puntos de fricción entre el Govern y los Comunes, socios imprescindibles para aprobar los presupuestos.
Mientras Territorio defiende que la revisión es necesaria para garantizar inversiones, los Comunes insisten en que una eliminación de bonificaciones haría recaer el esfuerzo sobre quienes dependen del transporte público para su vida diaria. Las conversaciones continúan, pero la advertencia política ya está sobre la mesa: si suben los precios del transporte, los presupuestos de 2026 peligran.