Imagen de archivo de Diana Morant y Pilar Bernabé

Imagen de archivo de Diana Morant y Pilar BernabéEuropa Press / Rober Solsona

El PSOE valenciano activa una 'caza de brujas' por la crisis de los acosos sexuales

La formación de Morant y Bernabé remite una carta a la militancia en la que anuncia «medidas» si desvelan la identidad de las víctimas

La reacción del PSOE en general a los numerosos casos de supuesto acoso sexual a compañeras de partido que se vienen conociendo desde hace días y la del PSPV, la rama valenciana de los socialistas, en particular al respecto del exalcalde de la localidad de Almussafes, Toni González, está siendo doble. Así, si por un lado condenan los hechos denunciados, por otro tratan de defenderse de las acusaciones de pasividad y de presuntamente tapar los escándalos aludiendo al protocolo interno para circunstancias como las actuales.

El citado documento, titulado Protocolo Frente al Acoso Sexual en el PSOE y consultado por El Debate, establece en el apartado d) del artículo 1 del Anexo sobre «procedimientos de gestión de denuncias» que en los «supuestos» al respecto, «cuando los hechos aparentemente pudieran revestir el carácter de delito conforme al Código Penal serán traslados al Ministerio Fiscal, si no hubieran sido ya denunciados ante este o los Juzgados penales, para que este valore, en su caso, la pertinente querella prevista en el artículo 191».

Hasta el momento, no hay constancia de que la cúpula de la organización, cuya máxima responsable en temas de Igualdad es la delegada del Gobierno en la Comunidad Valenciana, Pilar Bernabé, haya elevado ningún escrito a la Fiscalía instándole a investigar por la vía judicial los episodios que ya son de dominio público. Tampoco lo ha hecho la secretaria de Organización, la también valenciana Rebeca Torró. Y en cuanto a la ministra de Ciencia, Innovación y Universidades y líder de la federación, Diana Morant, no se le conocen declaraciones internas o en foros abiertos urgiendo a llevar a cabo la medida que contempla su propio partido como obligación.

«Se tomarán medidas»

Lejos de todo ello, el PSPV-PSOE lo que ha hecho ha sido remitir a su militancia una carta que podría calificarse como una suerte de 'caza de brujas'. De este modo, la misiva exige «calma» y «máxima responsabilidad» en cualquier «actuación pública e interna» relacionada con los presuntos acosos: «Queremos dejar claro que también se tomarán medidas contra aquellas personas que revelen públicamente la identidad de la víctima, que utilicen grupos o redes sociales para amedrentarla, o que traten de ponerse en contacto con ella de forma directa o a través de terceras personas con el ánimo de intimidarla», apunta, firmándola el número dos de Morant, Vicent Mascarell.

Y prosigue: «Es imperativo que toda la militancia del PSPV-PSOE respete de forma estricta las directrices emitidas por nuestra Secretaría de Igualdad», avisa, a la par que ruega que «en estos momentos donde se han tomado decisiones sobre temas orgánicos e institucionales, pedimos mantener calma a la militancia y máximo respeto a los procesos de investigación que se están llevando a cabo». Igualmente, la carta a los militantes señala que la formación ha actuado con «firmeza y diligencia» en el caso de Almussafes contra quien también hasta hace días era el número dos socialista en la provincia de Valencia.

Fuentes del PSPV-PSOE preguntadas por El Debate sobre el contenido del documento enviado y por si lo comparten, se alinean con el argumentario esgrimido por la dirección del partido: «Hemos mostrado nuestra más absoluta repudia a los hechos denunciados y no podemos interferir en la investigación ni hay que acosar absolutamente a nadie», aseveran.

En este sentido, defienden que la federación «siempre que ha aparecido una denuncia, sobre todo de acoso sexual» ha reaccionado «con total contundencia». «La secretaria general ya dijo que el alcalde Almussafes tenía que dimitir de todos los cargos y fue suspendido de militancia. Ese ha sido el primer paso. A partir de ahí, somos el único partido que actúa desde el minuto uno», comentan los mismos confidentes sin entrar en si el asunto se debe trasladar a la Fiscalía.

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