Varias personas se congregan en el cauce del Turia en un reparto de comida
Valencia
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El Consistorio busca ya un nuevo emplazamiento para que la ONG Ayuda a una Familia pueda seguir con el reparto de comidas con unas «condiciones higiénico-sanitarias» mínimas
El Ayuntamiento de Valencia se ha comprometido a buscar un nuevo emplazamiento conforme a la ley y sin provocar problemas a la hora de que la ONG Fundación Ayuda a una Familia pueda seguir repartiendo raciones de comida a personas sin techo en la ciudad del Turia. Así lo ha anunciado la concejal de Servicios Sociales, Marta Torrado, quien ha asegurado que el Consistorio quiere que continué esa labor solidaria que da de comer a 600 personas vulnerables al día, pero en unas condiciones «higiénico-sanitarias adecuadas».
El origen de la polémica viene después de que el equipo de gobierno municipal revocara el permiso para que la organización siguiese con la actividad. Lejos de ser una decisión ideológica o partidista, el Organismo Autónomo Municipal (OAM) Parques y Jardines de la capital elaboró en los últimos días un informe en el que trata la incidencia del reparto solidario de alimentos, juntamente a las condiciones «higiénico-sanitarias» que por él se daban lugar en el tramo III del Jardín del Turia, en los alrededores del Paseo de la Petxina, entre la iglesia de Jesuitas y el jardín de Las Hespérides.
Restos de comida y envoltorios en el parque del Turia
En el texto se subraya que el impacto de esta actividad «es inasumible», e insta a que todo ello «se traslade a unas instalaciones fuera del Jardín del Turia adecuadas para tal fin, y que cuenten con un recinto cubierto con instalaciones de aseo y limpieza personal», en consonancia con lo marcado por Torrado.
«Comedor improvisado»
Igualmente, y tal como se recoge en el informe, en los últimos meses se había intensificado el reparto de alimentos para personas sin techo. Se trataba, tal como se explica, de una iniciativa solidaria que se realizaba todos los días a las 14 horas por parte de Fundación Ayuda una Familia, con sede en la localidad valenciana de Paterna. Sin embargo, dicha acción «creaba incidencias en el propio Jardín de las Hespérides, que se convertía en un comedor improvisado».
Tal como se establece en el documento municipal elaborado, se trata de un espacio ajardinado «que, lógicamente no está acondicionado para este uso, y que presentaba una acumulación de deyecciones de los comensales y una cantidad ingente de envases de comida». Por si no fuera suficiente, líneas abajo se especifica que estas actuaciones conllevan un «efecto secundario», como es «convertir el Jardín en un espacio de pernoctaciones no controlado».
Varios recipientes de comida se amontonan fuera de una papelera del parque del Turia
La ubicación de esta actividad se trasladó a principios del pasado mes de noviembre al tramo III del Jardín del Turia. Como consecuencia de ello, en este espacio público que habitualmente acoge una gran cantidad de personas usuarias, dado su carácter lúdico y deportivo, «se están registrando graves incidencias higiénico-sanitarias que afectan a la salud pública», según denuncia el informe elaborado.
Entre otras, las incidencias se concretan básicamente en la «acumulación de restos de comida diseminados por el Jardín». «Ante la falta de medios del OAM Parques y Jardines para asumir su retirada inmediata, se está produciendo un aumento en la presencia de cucarachas, roedores y fauna avícola, lo que conlleva el consiguiente incremento de patógenos y parásitos, además de acumulaciones de deyecciones animales, a los que se suman los excrementos de los propios comensales y los restos arrojados de alimentos», indica el texto.
Por todo ello, el personal técnico de Parques y Jardines reconoce en su informe que el reparto de alimentos envasados en ese tramo es un acto solidario con las personas sin techo. No obstante, recalca que «tiene un impacto social e higiénico-sanitario en su entorno que es inasumible por este espacio ajardinado». Cabe recordar que se trata de un itinerario que acoge numerosos visitantes, entre personas usuarias de las instalaciones deportivas y viandantes que lo atraviesan de paseo o en ruta hacia el resto de tramos del jardín. Por ende, según el OAM, «no puede convertirse en un foco de residuos y una alerta sanitaria».
Evitar el «efecto llamada»
Además, este reparto solidario de alimento está teniendo un «efecto llamada» para que personas sin techo pernocten en asentamientos improvisados a lo largo del Jardín del Turia, se subraya en el informe, que añade que estas agrupaciones humanas «acaban convirtiéndose en verdaderos poblados, en los que se detectan problemas de seguridad por el encendido de hogueras, las peleas internas o los y enfrentamientos con otros usuarios del jardín».
Contenedores a rebosar en el parque del antiguo cauce del Turia, en Valencia
«Incluso se han dado casos de enfrentamientos y amenazas por parte de personas de asentamientos a operarios del OAM Parques y Jardines, que se ven imposibilitados a realizar sus funciones ante el riesgo de poner en peligro su integridad», lamenta el Ayuntamiento.
En conclusión, el Consistorio incide que la zona afectada, y por extensión, todo el Jardín, «no puede acoger estas actuaciones solidarias de reparto de alimentos, al no disponer de las infraestructuras necesarias ni del personal recomendable para mantener su correcta limpieza».
«Dado que este jardín carece de las pertinentes instalaciones para acoger decentemente a los comensales, ni para favorecer su higiene personal y la de sus ropas o utensilios, se solicita que se traslade este punto de reparto solidario de alimento a unas instalaciones fuera del Jardín del Turia adecuadas para tal fin, y que cuenten con un recinto cubierto con instalaciones de aseo y limpieza personal, en las que puedan compaginarse con dignidad y seguridad el reparto solidario con el control higiénico-sanitario, tanto de sus usuarios como de las propias instalaciones», hace hincapié el documento.
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