
Un micro-UAV Black Hornet 3 del Ejército del Aire y del Espacio
Ejército del Aire y del Espacio Microdrones para los paracaidistas españoles: más capacidades para operar en ambientes urbanos
El Escuadrón de Zapadores Paracaidistas ha incorporado el micro-UAV Black Hornet 3, diseñado para proporcionar inteligencia en tiempo real
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Las guerras y conflictos de Ucrania y Palestina han constatado, por si alguno tenía dudas, que los campos de batalla actuales y del futuro estarán infectados de drones y vehículos aéreos tripulados por control remoto. Y las Fuerzas Armadas españolas son muy conscientes de ello. Desde que empezaron a adquirir los primeros sistemas, a partir de 2015, en el marco del Programa Rapaz del Ministerio de Defensa, han acelerado su compra e integración operativa. Una de las unidades más recientes en experimentarlos e incorporarlos ha sido el Escuadrón de Zapadores Paracaidistas (EZAPAC) del Ejército del Aire y del Espacio, la unidad de operaciones especiales de esta institución.
La EZAPAC es una unidad de élite del Ejército del Aire localizada en la base aérea de Alcantarilla (Murcia) y adiestrada para las misiones más arriesgadas como golpes de mano, neutralización de objetivos, rescate de pilotos en territorio hostil, ataques aéreos a tierra, y combate en áreas densamente pobladas. Por ello está dotada del más moderno armamento, así como una preparación única.

Un militar muestra un micro-UAV Black Hornet 3
Una de las últimas capacidades que ha incorporado es muy pequeña en tamaño, pero muy poderosa y eficiente para proporcionar inteligencia y reconocimiento en tiempo real, sobre todo en ambientes urbanos donde el enemigo puede ocultarse en cualquier parte y sus ataques son mortíferos. Se trata el micro-UAV Black Hornet 3.
Durante las primeras semanas de enero, los especialistas de UAV y Equipo Especial del EZAPAC han sido formados y cualificados para operar el sistema como pilotos del Black Hornet, añadiendo este sistema a los drones ya empleados por el escuadrón como el Raven o el WASP.Con esta nueva adquisición se cubre la necesidad de un sistema capaz de dotar de conciencia situacional (SA, Situational Awarnesses) a los operadores del EZAPAC en espacios urbanos o confinados donde volar otro dron de mayor tamaño sería imposible.
13 centímetros y 33 gramos
El Black Hornet 3, integrado en la categoría Clase I tipo Nano, mide aproximadamente 13 centímetros de longitud y pesa alrededor de 33 gramos. A pesar de su tamaño, está equipado con microcámaras electroópticas y con capacidad térmica, las cuales transmiten imágenes de alta resolución en tiempo real a una consola portátil. Su autonomía de vuelo es cercana a los 30 minutos, lo que permite a las unidades de Operaciones Especiales obtener información crítica del entorno sin ser detectadas.
Según el fabricante, la empresa FLIR Systems, las cámaras y sensores del vehículo no tripulado transmite imágenes en un radio de acción de dos kilómetros. El operador puede recibir tanto imágenes en movimiento como fijas en directo con calidad HD. Asimismo, puede actuar tanto de día como de noche en zonas en las que no hay señal de GPS.

Un micro-UAV Black Hornet 3 en vuelo
La versión 3 incorpora algunas mejoras como una mayor velocidad de avance hasta alcanzar los seis metros por segundo y un módulo de carga de baterías diseñado para ser portado por un soldado con diversos modos de carga. Sus señales visuales y audibles extremadamente bajas permiten a soldados a pie llevar a cabo operaciones encubiertas con mayor seguridad. Puede utilizarse prácticamente en cualquier lugar y momento sin necesidad de coordinación previa del espacio aéreo.
Este micro-UAV es especialmente útil en operaciones especiales, donde la discreción y el conocimiento del terreno son fundamentales. Permite a los operadores realizar reconocimientos en áreas urbanas y rurales, así como vuelos en interiores de edificios, para de esta manera identificar amenazas potenciales, minimizar riesgos tanto de daño colateral como de bajas propias, aumentando de esta manera la eficacia de las misiones asignadas.
El Black Hornet ha demostrado su valía en conflictos actuales, siendo utilizado por diversas fuerzas armadas en todo el mundo. En Ucrania, por ejemplo, se ha utilizado su capacidad para proporcionar inteligencia en tiempo real, lo que ha sido crucial en operaciones de reconocimiento y vigilancia. Según la compañía, ya han vendido más de 12.000 Black Hornet 3 a diferentes empresas y fuerzas de seguridad de todo el mundo.
Según el Ejército del Aire, «la adquisición del dron Black Hornet 3 por parte del EZAPAC refuerza las capacidades de las Fuerzas Especiales españolas, permitiendo operar con mayor seguridad y eficacia en entornos complejos y en conflictos contemporáneos donde la información en tiempo real es esencial para el éxito de las misiones».
Cientos de UAVS militares
El Ministerio de Defensa, a través de la subdirección de Planificación, Tecnología e Innovación (SDG PLATIN) de la Dirección General de Armamento y Material (DGAM), inició a mediado de 2015 el llamado Proyecto Rapaz.
Se trata de una iniciativa que tiene por objeto la evaluación operativa de Sistemas Aéreos Tripulados Remotamente (RPAS) Clase I, es decir, con peso al despegue inferior a 150 Kg. Para ello se lanzó una invitación a aquellas empresas del sector que disponían de sistemas Clase I considerados maduros desde el punto de vista tecnológico y que permitían aportar capacidades de Inteligencia, Vigilancia y Reconocimiento (ISR).
La evaluación se materializó a través de campañas de vuelo e instrucción durante los años 2015 y 2016 en diferentes unidades de las Fuerzas Armadas. A finales de este año, por ejemplo, la Fuerza de Guerra Nacional de la Armada (FGNE) adquirió una primera versión del Black Hornet y a partir de abril de 2021 se adiestró con la versión 3.

Seguimiento de uno de los microdrones para los paracaidistas españoles
En abril de 2018, la brigada Alfonso XII II (BRI II) de la Legión fue la primera de las FAS españolas en recibir el Black Hornet. Los probó operativamente inicialmente en la base «Álvarez de Sotomayor» de Viator (Almería). Asimismo, fueron adquiridos por el Mando de Operaciones Especiales (MOE), entre otras unidades como el Regimiento de Inteligencia nº I del ET, que tiene base en Valencia.
Más de 500 unidades del Back Hornet 3
En verano del año pasado, el Mando Logístico de Apoyo Logístico licitó la adquisición de RPAS (Remotely Piloted Aircraft System) Clase I Mini de ala fija y Micro de ala rotatoria. El primer lote, con un presupuesto de 18 millones de euros, fue para la compra de 500 de estos sistemas. En concreto, la fuerza terrestre buscaba obtener 114 sistemas de la clase I Micro, cada uno de los cuales está compuesto —como mínimo— por cuatro drones multicóptero (de alas rotatorias), por lo que la suma total asciende a 456 aparatos. Cada aeronave está equipada con una cámara giroestabilizada con sensores electroópticos e infrarrojos (EO/IR) y ser capaz de transportar otras cargas como foto, altavoz, equipos de detección NBQR, sistemas de enganche para cargas externa.