La líder del BNG, Ana Pontón, junto a sus compañeras

La líder del BNG, Ana Pontón, junto a sus compañeras

El BNG quiere que los negocios que cobren ayudas estén obligados a cumplir «cláusulas de igualdad»

Los nacionalistas quieren también que se haga una auditoría sobre las empresas ya relacionadas con la Xunta para averiguar si cumplen con estos requisitos

El BNG quiere que las empresas que se relacionen con la administración gallega tengan que cumplir por ley con «cláusulas de igualdad». De esta manera, la líder nacionalista Ana Pontón pretende regular los contratos públicos y subvenciones para que únicamente se concedan a aquellos negocios que tengan este requisito.
Por eso, avanzó en un acto sobre el 8M que el BNG registrará en las próximas semanas una proposición de ley gallega para la inclusión de cláusulas sociales y de igualdad en la contratación pública y en el régimen de subvenciones porque «el sector público tiene mucha capacidad para poder incidir de manera directa en las condiciones de vida de muchas mujeres y es importante que se utilicen estas fórmulas para ir eliminando situaciones de discriminación o de precariedad laboral, donde la Xunta es directa o indirectamente responsable», ahondó.
La líder nacionalista propuso también una auditoría sobre la situación de las mujeres en las contrataciones públicas que estén sufragadas por la Xunta, con el objetivo de conocer en que situación están trabajando, con que salarios y se «se están realmente cumpliendo tanto los convenios colectivos como la legislación vigente», comenzando por aquellos sectores especialmente sensibles cómo lo de la limpieza.

Acusaciones al PP

En esta línea, señaló al PP como precursor en Galicia «de muchas de esas políticas de retrocesos en derechos y libertades de las mujeres». «Este es el compromiso que tiene el Partido Popular en Galicia con las políticas de igualdad», denunció.
En el mismo acto, la diputada Noa Presas ha hecho un llamamiento a la movilización el 8M para «seguir demandando avances en materia feminista» y para que esta no se convierta «en una fecha ritual» y «edulcorada».
«En la última década las movilizaciones han conseguido grandes avances en términos de feminismo de los que estamos orgullosas», ha dicho Noa Presas, que ha alertado sobre el «renacer del patriarcado» a través de «fuerzas políticas profundamente machistas» y animando a no caer en el «conformismo».
Por su parte, la alcaldesa de Santiago, Goretti Sanmartín, que también estuvo en el acto instó a seguir con las «gafas violeta» para comprobar como la realidad del día a día confirma el «mantenimiento de las discriminaciones de las mujeres en el ámbito laboral, económico, sanitario, educativo o en el de la conciliación».
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