Mujeres japonesas con una cesta llena de cosechas frescas de su huerta.
Ni Tokio ni Kioto, este es el nuevo destino de Japón preferido por los españoles
La imagen más común que tenemos los españoles de Japón se enfoca hacia la gran urbe de Tokio, con sus barrios hiper modernos saturados de luces de neón que contrastan con los templos centenarios, visitas obligadas antes de tomar un tren bala hacia el próximo destino, principalmente Kioto u Osaka.
Hay un Japón distinto, vibrante y soleado que está acaparando la atención y el interés de los viajeros españoles
Pero además de este Japón que muchos imaginan hay un rincón distinto, vibrante y soleado que está acaparando la atención y el interés de los viajeros nacionales, hasta el punto de haber aumentado exponencialmente sus búsquedas de vuelos para llegar hasta allí, hasta el archipiélago de Okinawa. Este conjunto de unas 160 islas, 44 de ellas habitadas, ofrece un entorno tropical que recuerda a los destinos mediterráneos o caribeños.
Playas y buen tiempo
Okinawa se asemeja a destinos del Caribe o del Mediterráneo.
El buen clima de Okinawa, su identidad propia y sus playas han hecho que cada vez más viajeros españoles lo consideren su otro Japón. Okinawa representa una cara menos vista del país. La isla más poblada, la isla principal, alberga la capital, Naha, y fue centro del antiguo reino independiente de los Ryukyu. Aquí el viajero encuentra castillos tradicionales, pueblos con encanto, una gastronomía singular y un ambiente relajado. Es la puerta de entrada al archipiélago.
Buceo en las aguas cristalinas de Okinawa.
Una de las mayores razones para visitar las islas de Okinawa son sus playas: arenas blancas, aguas color turquesa y fondos coralinos que invitan al esnórquel, al buceo o simplemente a descansar bajo el sol. Islas como las del grupo Kerama o Yaeyama se cuentan entre los arrecifes más hermosos del país, ideales para quienes buscan buceo, naturaleza marina y tranquilidad lejos del turismo masivo.
Reinos y castillos
Castillo de Okinawa.
Okinawa es también singular por su cultura vinculada al antiguo Reino de Ryukyu, que gobernó las Islas Ryukyu (actual Prefectura de Okinawa) desde el siglo XIV hasta el siglo XIX. Esta herencia ha llegado viva hasta hoy en tradiciones, arquitectura, música y artesanía. Ruinas y castillos restaurados, los llamados gusuku, recuerdan una historia diferente del resto de Japón; aprender sobre esa identidad, recorrer sus pueblos o asistir a celebraciones locales es una experiencia tan enriquecedora como relajante.
Mejor temporada
Vista del archipiélago desde las islas Kerama.
En cuanto a clima y temporadas, Okinawa tiene la ventaja de ofrecer buen ambiente buena parte del año. Primavera y otoño son momentos especialmente ideales: temperaturas moderadas, menos lluvias y playas en calma, evitando tanto el calor extremo del verano como la saturación turística.
Para el viajero español que ya ha visitado Japón y conoce sus grandes ciudades y templos, ha visto a las geishas y se ha hecho un selfi con los jóvenes vestidos como personajes del manga, Okinawa funciona como un lugar donde combinar el exotismo del Japón contemporáneo con el mar, los arrecifes de coral, el sabor de una cocina diferente y un estilo de vida pausado y saludable que invita a olvidarse del reloj.