Oleksii Reznikov, ministro de Defensa de Ucrania
El ministro de Defensa de Ucrania minimiza el riesgo de guerra
Oleksii Reznikov: «No hay motivos para pensar que mañana habrá una invasión»
La retórica beligerante no es buen aliado para la paz. Oleksii Reznikov, ministro de Defensa de Ucrania, salió a rebajar la creciente tensión sobre una posible invasión de Rusia. «No hay motivos para pensar que mañana ocurrirá una invasión desde el punto de vista de militar», garantizó. «Hasta hoy, el ejército ruso no ha formado un grupo de ataque que pueda lleva a cabo una invasión», insistió el máximo responsable de la defensa ucraniana. Dicho esto, matizó: «Todo es posible» por que siempre, «existe un riesgo.»
Tras una reunión a puerta cerrada con el cuerpo de legisladores, Reznikov hizo estas declaraciones ante un grupo reducido de periodistas, como recoge Bloomberg. «El pánico y el miedo son los que mayor atención obtienen». Las palabras del ministro estaban dirigidas a los medios de comunicación a los que reprochó su alarmismo. Reznikov mostró su malestar por la cadena de titulares que, prácticamente, dan por hecho una invasión cuando, objetivamente, según su criterio, no hay motivos para considerar inminente esa posibilidad.
Para el hombre que tiene en la cabeza la estrategia de defensa y el mapa de los más de cien mil soldados rusos desplegados en torno a la frontera de ambos países, dar crédito a esa supuesta cuenta atrás de un estallido de la guerra, significa hacer el juego al Kremlin cuyo objetivo, destacó, es generar terror en Ucrania para desestabilizar al gobierno. El objetivo implícito de esa campaña mediática o arista de lo que se denomina guerra híbrida, aunque no lo mencionó, sería que Rusia, finalmente, pudiera logar la anexión de Ucrania. El ministro recordó que los ucranianos viven en un contexto de guerra desde 2014, cuando Rusia se apoderó de la península de Crimea y espoleó el separatismo de la región oriental de Donbás.
Apuntar con el dedo a los medios de comunicación, no parece que fuera la decisión más justa después de que las embajadas de Estados Unidos y de Reino Unido se apresuran a difundir que habían decidido prescindir de buena parte de su personal como medida preventiva. En simultáneo Washington envió toneladas de armamento para la zona de conflicto y la mayoría de los países miembros de la OTAN hicieron diferentes aportes con material bélico. Joe Biden caldeó aún más los ánimos al anunciar, además de las sanciones previstas por la Alianza, un paquete especifico y personal directamente para Vladimir Putin, algo nunca visto hasta la fecha.
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