El primer ministro británico, Boris Johnson, en la Cámara de los Comunes
La investigación del ‘Partygate’ concluye con 126 multas
El primer ministro Boris Johnson se incluye entre los multados por celebrar su cumpleaños con una fiesta sorpresa
Tras meses de polémica y críticas al Gobierno de Boris Johnson, el tema del ‘Partygate’ empieza a zanjarse. La Policía Metropolitana anunció el final de su investigación a las fiestas clandestinas del número 10 de Downing Street durante la pandemia, y multó a 126 personas.
Scotland Yard finalizó la denominada Operación Hillman, y comunicó que había multado a 53 hombres y 73 mujeres, sin llegar a confirmar sus identidades. De los sancionados, ocho personas recibieron entre dos y cinco multas.
La investigación, que costó más de 640.000 libras, se centró en 12 encuentros que tuvieron lugar mientras seguían vigentes las restricciones por coronavirus.
Se multó a los presentes en ocho de aquellas reuniones, incluyendo la fiesta de «trae tu propia bebida» de mayo de 2020, el cumpleaños de Johnson, la celebración de despedida de los asesores en noviembre de 2020, y una fiesta navideña.
Johnson, que supuestamente estuvo presente en la mitad de las fiestas investigadas, fue multado por la celebración de su cumpleaños en la que lo «sorprendieron» con una tarta. Tanto su mujer, Carrie, como Rishi Sunak, ministro de Hacienda, recibieron sanciones por ir al mismo evento.
La Policía explicó que un equipo de 12 detectives examinó 345 documentos, incluyendo emails, registros de entrada, diarios y declaraciones de testigos.
También inspeccionaron 510 fotografías, grabaciones de cámaras de seguridad, y 204 cuestionarios. No entrevistaron a nadie.
«La investigación siempre tuvo en cuenta la fecha de cada evento, las circunstancias de cada uno de ellos, y los movimientos de cada persona, con respecto a la legislación del momento».
«Así, pudieron establecer si su comportamiento correspondía al umbral criminal necesario para recibir una multa», explicó un portavoz de Scotland Yard.
La Policía agregó, además, que se esforzaron «por asegurar que por cada multa existieran suficientes pruebas para desencadenar un proceso en los tribunales, si no se pagaba».
La pregunta, ahora, es cuándo se publicará el informe de la funcionaria Sue Gray. Su ansiada investigación se retrasó por petición de la Policía, pero ahora que sus pesquisas concluyeron, Gray tiene luz verde para hacer públicas las suyas.
De acuerdo con la información que varios parlamentarios compartieron con el periódico The Times, este último informe será más preocupante para Boris Johnson.
Se entiende que es tan crítico con el premier y con su gestión, y con el ambiente laxo imperante en el Número 10 bajo su liderazgo, que podría empujarle a dimitir.
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