Navalni denuncia desde la cárcel que le prohíben las visitas de médicos aunque esté enfermo
El opositor ruso fue trasladado 15 días a una celda de castigo por haberse duñado antes de la hora reglamentaria
Actualizada 17:23
El líder opositor ruso, Alexéi Navalni, encarcelado desde hace dos años por Putin denunció, por medio de sus colaboradores, que se le negaba el acceso a la atención médica pese a estar enfermo. Sus partidarios, una vez más, acusan al Kremlin de tener como objetivo «matarlo» poco a poco.
Navalni debía asistir durante el día por videoconferencia a tres audiencias relativas a denuncias contra las restricciones impuestas por la administración penitenciaria.
En la reunión se dirigió a la jueza y solicitó un aplazamiento de las tres audiencias por razones de salud, que le fue concedida, según su portavoz, Kira Iarmich.
Navalni, de 46 años, afirmó que tenía que llevar a cabo «una lucha encarnizada» para obtener «medicamentos básicos» y que se le había negado ser hospitalizado en la unidad médica de su prisión, situada a 200 km de Moscú.
Tardé cuatro días en conseguir un poco más de agua calienteAlexéi Navalni
Con «fiebre y tensión alta», le dijo a su equipo, «tardé cuatro días en conseguir un poco más de agua caliente».
La administración penitenciara, según describió, obligaba a su compañero de celda a ir y volver de su calabozo a la unidad médica de la prisión, mientras se registraba una epidemia de gripe severa.
El presidente ruso «(Vladimir) Putin sigue intentando matar a Navalni, pero de manera más discreta y lenta», denunció el miércoles su equipo.
Cerca de 500 médicos rusos firmaron una petición, publicada en Facebook, en la que pedían a Putin que proporcionara cuidados adecuados a Navalni y que pusiera fin a los «malos tratos» contra él.
Celda de castigo
El lunes, el activista anunció que el 31 de diciembre fue enviado por décima vez a una celda disciplinaria, por un período de 15 días, donde su aislamiento y sus derechos están aún más limitados, por haberse bañado antes de la hora reglamentaria.
Navalni, firme opositor de Vladimir Putin y de la ofensiva militar en Ucrania, fue detenido en Rusia en enero de 2021, a su regreso al país después de sufrir un grave envenenamiento que se atribuye al Kremlin.
En marzo fue condenado a nueve años de prisión en régimen «severo» por acusaciones de «estafa» que considera ficticias.
El portavoz del Departamento de Estado estadounidense, Ned Price, publicó el miércoles en Twitter: «Nos hacemos eco de las preocupaciones de más de 170 médicos rusos que piden el fin del maltrato de Navalni y que se le brinde todo el cuidado médico apropiado».